¿Cuando te diste cuenta de que amabas a Madonna? ¿Sabías que casi es Gatúbela en Batman Vuelve? ¿Alguna vez te pusiste a analizar el arte de tapa de sus discos? Todas estas preguntas son parte del podcast Santa Madonna: el primero en castellano que nos reúne, no tanto para responderlas, sino para ser aquelarre alrededor de la flamígera reina del pop.
Alejandro Parrilla (Parri) siempre fue melómano. Eran los ‘80 y aunque su banda favorita era La Torre (con Patricia Sosa de vocalista), la canción que amaba era Chica Material, en español, tal como se conocían todos los temas en ese momento. “¿Por qué es como una virgen? ¿Cómo la de Luján?”, rebotaba entre los adultos preguntando. Había algo magnético en esa blonda y Parri lo sabía, hoy lo comprende como el ADN de una generación.
A Agustín Aguirre lo cuidaba Jessica, una empleada que era fan de La Isla Bonita. Sumado a hermanos mayores que llenaban la casa de música las referencias madonísiticas impregnaron al pequeño. Pero este tema era especial, porque desde Bariloche se veía la Isla Victoria y Agus pensaba (sabía) que Madonna se la cantaba a ella.
Todavía faltan muchos años para que un amigo de un amigo le diga a Agus que tiene otro amigo que se llama Parri que es fan de Jurassic Park, Tori Amos y Madonna. Y falta mucho más para que Parri y Agus se junten a pensar un podcast dedicado a la Ciccone. Pero es enero de 1996 y un país se convulsiona porque la camaleónica cantante pide el balcón de la Casa Rosada para hacer de Eva Perón. “Yo llegué a Evita a través de Madonna y hoy tengo una concepción de la política que ocupa un lugar importante en mi vida”, dice Parri como una de las miles de personas que también llegó a una por otra, y destaca el rol de la artista como divulgadora de tantas cosas.
A través de los más de 70 episodios que forman Santa Madonna esa divulgación se hace presente en un multiverso que va desde la conexión entre la diva y el universo de Rupaul Drag Race hasta el link entre su icónica canción VOGUE y el mundo del ballroom. Agus y Parri buscan desesperadamente a su estrella de la suerte y tejen el telar de información, invitades, reliquias, mitos y temazos materializando un espacio que invita. “Los putos siempre adoptamos una figura del pop femenino que nos guía por el resto de nuestras vidas”. Madonna también es un lugar de encuentro y este podcast es la plegaria que rezamos desde nuestra borderline.
La tríada se completa con el productor Nico Capeluto a quien ‘el llamado’ le llegó durante el recital del Sticky And Sweet Tour de 2008: “Me acuerdo que la vi a ella ahí parada en el escenario, sola y el estadio de River se vino abajo”. Ese poder le impactó a punto tal que esa onda expansiva hizo que hoy sea parte de este proyecto.
Fue en ese mismo recital que ante la mirada de la reina Agus y Parri sellaron una amistad que comienza cada vez que le dan PLAY a todo lo que hacen: “En esa primera fecha del Sticky quedamos pegados al paraavalanchas de 5 de la tarde a las 12 de la noche”, cuenta Parri y Agus dice “lo protegido que me sentí en ese recital que no me enteré de nada de lo que pasaba atrás”. Lo cuentan y se les llenan los ojos de lágrimas, es una amistad tan grande, es una Celebration. Y de este hecho fundacional se comprende porque el episodio uno va aún más atrás y revisita lo que pasó hace ya casi 30 años con la visita del Girlie Show Tour al país para luego en el 56 recordar los 10 años del MDNA Tour.
Escuchar el trabajo de estos más que fans curadores nos recuerda algo fundamental sobre cada vez que Madonna tomaba una decisión artística: todos los pronósticos decían que se iba a cagar la carrera y desaparecer del mapa. Con el diario de hoy mucha gente se olvida los riesgos que ella tomó, la gente que la abandonó pensando que el barco se hundía, las puertas que le cerraron y las que ella abrió al visibilizar la sexualidad, la cultura LGBT+, la fuerza feminista, la lucha contra el VIH y sida y tanto más. Cuando Parri, Agus y Nico traen episodios como en el que analizan el recorrido de Like a Virgin o el de los 30 años de Erótica nos invitan a realizar una disección musical, social y política de nuestra sociedad. Live To Tell, vivir para contar.
Y mientras suena fuerte algún temazo y todas nos parecemos al emoji de la bailarina de flamenco que tranquilamente podría estar bailando La Isla Bonita comprendemos que esos pies que pisan lejos hablan de estar en el pasado y presente de la usina creativa que es Madonna y que está lejísimos de su fecha de caducidad. Tanto es así que nos encontramos palpitando los rumores de una visita 2024.
¿Y qué le dirían a quien todavía o no la conoce o solo escuchó sus últimas cosas?
-Te recomendaría que des play y la esuches hasta que aparezca un tema que te resuene en algún lado. A partir de esa canción empezá a investigar un poco más y de a poco todo eso se va ir abriendo como una flor. Madonna se abre sola.