Leonardo Favio dirigió una de las películas más taquilleras en la historia del cine argentino, Nazareno Cruz y el lobo (con 3 millones 400 mil espectadores en 1975). Sus films se convirtieron en objeto de estudio de prestigiosas escuelas de artes visuales y también batió varios récords como cantautor romántico. Pero, ¿por qué nunca llegó a convertirse en remera? Esa es la pregunta que disparó la investigación de Florencia Halfon Laksman, quien perfila a este ícono popular estrechamente vinculado con el peronismo a través de conversaciones, viajes e investigación periodística. Favio vigente: un recorrido por sus pasiones (Ediciones Futurock) se presentará este sábado a las 16 en la sala José Hernández y contará con la presencia de su autora junto al investigador Fernando Martín Peña, la actriz Antonella Costa y el director Israel Adrián Caetano.