El planteo que hacen algunos directivos de Central tiene argumentos insoslayables: pedir la convocatoria de acreedores para resolver judicialmente la millonaria deuda del club. La situación económica lo amerita pero el presidente Gonzalo Belloso fue enfático ante sus compañeros de dirigencia para descartar esta solución a los problemas de la tesorería. El presidente canaya se propone el desafío de aumentar ingresos y hacer frente al pasivo con los recursos del club.
Los más de 4 mil millones de pesos que debe Central, de acuerdo a los resultados de la auditoría presentada días atrás (ver edición del pasado 5 de mayo) mantiene a los directivos auriazules en permanente debate sobre cómo hacer frente al millonario pasivo. Algunas acreencias inquietan más que otras. Y algunas requieren más urgente solución que otras. En este escenario es que aparece la opción de la convocatoria de acreedores, instancia donde el club automáticamente dejaría de pagar y se abre una instancia judicial donde cada acreedor debería demostrar con documentación el dinero que reclama. Pero Belloso descartó esta salida. El presidente no quiere relegar la autonomía de gestión que tiene la entidad y se propone encontrar en la propia gestión la salida a la grave situación. “Ya se empezó a pagar la deuda y vamos a seguir así, para eso nuestro propósito es aumentar los ingresos, generar más fondos y desde los primeros días lo estamos haciendo. Por ejemplo ya no es deficitario para la tesorería que el equipo juegue en el Gigante. Se redujo sustancialmente la entrega de protocolos, esto llevó a una mayor venta de plateas y con lo que se recauda por venta de entradas se logra hacer frente a todos los gastos que hay cuando se abre el estadio”, aseguró un colaborador del presidente.
La prioridad de la directiva es ahora reunir los 2.700.000 dólares que se necesitan para levantar inhibiciones en FIFA y así sumar refuerzos en el próximo receso de invierno. El club tiene aun dos meses para reunir los fondos.