Finalmente, las organizaciones sociales, políticas y sindicales que integran la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Unidad Piquetera (UP), el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y la CTA Autónoma decidieron conformar un frente común de protesta y anunciaron la movilización "más grande de los movimientos populares de los últimos quince años en la Argentina”. Será el próximo jueves 18 de mayo y tendrá como destino la sede del Ministerio de Desarrollo Social, ante la falta de respuesta a sus demandas de parte de la titular de esa cartera, Victoria Tolosa Paz. En una conferencia de prensa frente al Obelisco porteño, los dirigentes sociales convocaron a "un plan de lucha hasta que se resuelva el problema alimentario", y apuntaron contra el Gobierno, la "oposición patronal" y el "ajuste del Fondo Monetario Internacional".
Luego de muchos acercamientos, la CTA y los movimientos sociales afines al gobierno nacional aunaron sus reclamos a los de las agrupaciones piqueteras de la izquierda, que están en pie de guerra con Tolosa Paz y le exigen que los reciba desde hace más de tres meses. Para el secretario General de la UTEP, Esteban "Gringo" Castro, existe "una política común en contra de los movimientos populares". Por esta razón, reivindicó "la unidad" de cara a la manifestación del próximo jueves: "Estamos en un marco de unidad muy amplia de los movimientos populares. Es la más amplia que he visto y de la que he participado. Nos parece una falta de respeto que no podamos resolver el problema alimentario en nuestras organizaciones y nuestros barrios. Hay una decisión política de que eso no se resuelva y nos obliga a movilizarnos el 18 de mayo hacia Desarrollo Social, para empezar un plan de lucha hasta que se resuelva el problema alimentario".
El dirigente social alertó sobre la creciente dificultad que enfrentan los trabajadores para acceder a la canasta básica, debido a "un proceso de concentración que no tiene freno. Muy pocas empresas producen la mayor cantidad de alimentos y son las que deciden quién come y quién no en este país". Y señaló que "hay sectores de la oposición e incluso del gobierno, que la única idea que tienen es profundizar el ajuste sobre la base de un 40 por ciento de pobreza en la Argentina. Eso es intolerable, el proceso de unidad y de movilización se va a acrecentar”.
En este sentido, la secretaria adjunta de la UTEP, Dina Sánchez dijo: "No podemos seguir adelante con este acuerdo de ajuste con el FMI mientras la emergencia alimentaria es insostenible en nuestros barrios".
De esta forma, decenas de organizaciones marcharán el próximo jueves a partir de las 11 hacia la sede de Desarrollo Social, ubicada en la intersección de las avenidas 9 de julio y Belgrano. Participarán, junto a la UTEP y UP, el Frente Milagro Sala-FNT, Frente de Lucha, FENAT CTA-A, FETRAES, CNCT, Frente Piquetero, Frente Barrial CTA-T, Lealtad, entre otras agrupaciones. Desde las organizaciones convocantes esperan una concentración masiva, como lo manifestó el mismo Castro: "Quizás podamos ver una de las movilizaciones más grandes de los movimientos populares en los últimos 15 años”.
A su turno, el referente de UP y dirigente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, señaló: "Esta unidad debería ser un ejemplo para que la clase obrera ocupada también ocupe el escenario de lucha por el salario. El salario mínimo esta por debajo de la línea de indigencia y fue acordado por las patronales, el gobierno y la CGT. Es muy grave que los representantes sindicales aprueben salarios de hambre para los trabajadores que luego recibimos en los comedores populares mientras la ministra Tolosa Paz recorta los alimentos así como recorta la entrega de herramientas para proyectos productivos de nuestros compañeros".
Belliboni recordó la lucha sostenida de los piqueteros contra el gobierno y el "ajuste sistemático" que, aseguran, trasciende los nombres de quienes han ocupado el ministerio de Desarrollo Social. Sin embargo, el conflicto se profundizó desde la llegada de Tolosa Paz, que suspendió las incorporaciones al plan Potenciar Trabajo e implementó un sistema de validación de datos que derivó en la baja de 85.000 beneficiarios. Para el dirigente, la conformación de un frente común es "el primer paso de un plan de lucha por las reivindicaciones que necesitamos los trabajadores". "Las reivindicaciones hay que ponerlas por delante de todas las diferencias que podamos tener", aseguró.
Por su parte, el coordinador nacional de la Tupac Amaru y referente del Bloque Social por el Trabajo, Alejandro "Coco" Garfagnini, denunció la "criminalización de la protesta social", por la que militantes de organizaciones sociales "siguen siendo judicializados, procesados por pelear por nuestro pueblo", en diferentes provincias y pidió enfáticamente "la libertad de Milagro Sala que sigue siendo rehén de Gerardo Morales", un pedido que de esa manera ingresa en la agenda de este nuevo armado. Garfagnini, además, definió la situación económica del país como "un plan macabro, donde a las víctimas de esta crisis, que son los humildes de nuestra Patria, crisis generada por los dueños de la Argentina, se los pretende ubicar como los responsables de los problemas de la Argentina".
En tanto, la coordinadora nacional del MST Teresa Vive, Mónica Sulle, indicó que "esto muestra que en la calle es donde damos la pelea". "Como es tan fuerte la embestida contra las organizaciones sociales que hemos puesto el lomo desde hace años en las barriadas, no aceptamos a esta ministra que se niega a dar una reunión para resolver y que se la pasa en campaña electoral siguiendo los mandatos del Fondo", afirmó.