Divididos había anunciado el año pasado en conferencia de prensa que iba a festejar sus 35 años de historia con una gira nacional que tendría su parada porteña en Vélez Sarsfield, lo que significaría el regreso al estadio en donde en 1994 coronó las presentaciones de “La era de la boludez”, su disco más exitoso. Y así lo hizo en una fiesta en la que hubo invitados y sorpresas.
La banda conformada por Ricardo Mollo, Diego Arnedo y Catriel Ciavarella repasó su historia en una noche que comenzó con “Paisano de Hurlingham” y culminó, minutos antes de la 1 del domingo, con el clásico de Sumo “El ojo blindado”.
Tres horas a puro rock en el que hubo grandes invitados como Gustavo Santaolalla participando en "¿Qué ves?", sin embargo la frutilla del postre fue ver en un escenario de la Ciudad de Buenos Aires a Chizzo Nápoli y su banda, La Renga, primero para interpretar junto a Divididos “Sobrio a las piñas” y, después, para comerse un Velez Sarfield con "El final es en dónde partí".
La Renga, proscripta en tierras del PRO
"Tuvimos a La Renga en Capital, loco. Esto es lindo. Un acto de justicia", sentenció Mollo luego de prestarle el escenario a la banda de Mataderos que desde 2017 no puede presentarse en tierras macristas.
La última vez que La Renga dio un concierto en la Ciudad de Buenos Aires fue en 2017, cuando hicieron una triple fecha en la cancha de Huracán. Tras ese show, nunca más pudieron concretar un recital en la Ciudad o el conurbano bonaerense.
Los integrantes de la banda deslizaron en varias oportunidades que las repetidas cancelaciones a sus fechas en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se explica por una intencionalidad de las autoridades locales para boicotear el show. Puntualmente, cuando se canceló el show en Tecnópolis desde la producción denunciaron "censura" y "discriminación" por parte del municipio de Vicente López.
