El PRO bonaerense comienza a definir su estrategia para disputar la elección por la gobernación que tendrá su primer capítulo en las primarias del próximo 13 de agosto. Este lunes, en una reunión que mantuvieron los dos presidenciables amarillos, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, se terminó de acordar que ambos precandidatos llevarán a candidatos propios para disputar la PASO opositora y, de esa manera, se desechó la posibilidad de confluir en una candidatura única, como sí se hará en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Con Diego Santilli ya lanzado, y precandidato indiscutido desde el lado larretista, resta definir quién será el dirigente que encabece la lista identificada con la ex ministra de Seguridad macrista. A pesar de que Cristian Ritondo haya confirmado su pase al equipo bullrichista, la precandidata del ala más dura de la oposición afirmó la semana pasada que sus precandidatos a la gobernación siguen siendo sólo tres: el intendente de Lanús, Néstor Grindetti; el de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel; y el senador Joaquín De la Torre.

Ritondo formaba parte del reducido número de dirigentes que apoyaba las aspiraciones presidenciales de María Eugenia Vidal. Tal como se venía anticipando en la previa, la decisión de la ex gobernadora dejó a quien fuera su ministro de Seguridad sin paragüas nacional por lo que, al día siguiente de bajar su candidatura, Vidal lo acompañó a reunirse con Bullrich y firmar el cambio de escudería.

A pesar de eso, la decisión en el espacio de la presidenta, en uso de licencia, del PRO tardará en definirse. Entre otras cosas, porque todavía no resulta del todo claro cuál será la estrategia para afrontar la interna confirmada este lunes. Parte de esa decisión estará empujada por la estrategia del larretismo que evalúa la conformación de una fórmula cruzada que sume a algunos de los sectores con los que el espacio del macrismo centrista viene construyendo en los últimos meses.

En la tarde del jueves, el espació bullrichista lanzó una señal con destinatarios teledirigidos. Grindetti y De la Torre difundieron una foto que denota un encuentro y la construcción de una agenda conjunta. “Nos une la misma visión de la provincia”, escribieron ambos al compartir de la imagen en Twitter.

“Debemos avanzar en descentralizar la gestión para hacerla más eficaz fortaleciendo las autonomías municipales. Juntos coincidimos en la necesidad de acercar más el Estado provincial a la gente”, agregó Grindetti.

“Vamos a poner orden en las cuentas y en la calle”, sumó De la Torre.

En ese marco, mientas se observan los movimientos del radicalismo, la Coalición Cívica y el peronismo pichettista -¿también del schiarettismo?- otra duda terminó de despejarse también durante el fin de semana: José Luis Espert dejará de ser un problema para el armado del cambiemismo bonaerense. Durante la presentación de su último libro en la Feria del Libro, el diputado de la Libertad Avanza, que había lanzado su campaña para la gobernación, confirmó su incorporación a Juntos por el Cambio y afirmó que será candidato a Presidente.

Vale recordar que el espacio provincial del economista se fue desarmando en su representación bonaerense, y dos de los tres legisladores con los que contaba en la Cámara de Diputados provincial abandonaron la estructura para sumarse a los equipos de libertarios que encabeza nacionalmente Javier Milei.

Hacia el crecimiento del candidato de la Libertad Avanza apuntan las principales preocupaciones de la oposición que, con el objetivo de intentar reducir la influencia del peso nacional de Milei, espera que Kicillof decida desdoblar la elección general y se ocupan en buscar nuevos aliados. En ese sentido también hubo una definición este lunes. "Nuestros equipos de campaña avanzarán juntos en temas operativos como fiscalización de la elección y boletas y una posición única del PRO en relación a la incorporación de nuevas fuerzas políticas a Juntos por el Cambio", dice el primer punto acordado en el inicio de la semana. 

En lo urgente, resta oficializar la estrategia para el último tramo de la disputa, las intendencias. Si bien habrá una PASO presidencia y otra para la gobernación, la preocupación bonaerense que crece desde el interior provincial tiene que ver con la definición, tomada, acordada y ratificada, de sostener las conducciones municipales que hoy se ostentan.

A pesar de que ninguno de los oponentes PRO de los actuales intendentes PRO ha bajado aún sus precandidaturas, la tendencia marca que el acercamiento de las partes a nivel nacional podría contemplar un acuerdo para trabajar en pos del sostenimiento de los gobiernos locales. Por esa razón, gana cada vez más espacio la idea de que los candidatos a intendentes, al menos los que busquen la reelección, participen en las primarias como candidatos únicos aunque “colgados” de las dos boletas: la que llevará a Santilli como candidato a gobernador y a Rodríguez Larreta como aspirante a la Presidencia; y la que tendrá a Bullrich en el tramo nacional y alguno de sus muchachos aspirando a suceder a Axel Kicillof. 

Tal como se acordó, el tema seguirá en análisis y se definirá en algunas de las "reuniones periódicas" que las partes amarillas se comprometieron a sostener para  "avanzar en los temas pendientes, cuidando la unidad del PRO y de Juntos por el Cambio".