Hoy se verán cara a cara los más de 900 congresales del Partido Justicialista en un encuentro cerrado que se hará después de las dos de la tarde en el club Ferrocarril Oeste, en el barrio porteño de Caballito. Allí, según contaron a este diario, se van a designar a las autoridades partidarias para conformar las alianzas electorales a nivel nacional y se está trabajando para consensuar un documento en el que se exprese "la preocupación" que tiene el peronismo "por la avanzada de la Corte mafiosa sobre la libertad de votar de las provincias". El presidente Alberto Fernández, a la vez presidente del PJ, a tan sólo horas del evento, no confirmó su presencia y es posible que no asista. El oficialismo transita por estas horas momentos de incertidumbre total porque aún no tiene una estrategia electoral definida. Desde todos los sectores, mientras debaten públicamente si el espacio tiene que ir a las PASO o debe llegar a un acuerdo y tener un candidato de unidad, esperan ansiosos una definición de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, que aparece como la única capaz de ordenar el tablero político del FdT de cara al cierre de listas, para el que falta poco más de un mes.
El Presidente estuvo ayer lunes en La Pampa con el gobernador, Sergio Zilliotto, luego de la reelección que el pampeano alcanzó el domingo. Tras el acto del que participaron juntos, en declaraciones a la prensa, Fernández dijo que el Congreso Partidario de hoy será "tranquilo". "Es un trámite que tenemos que hacer, que es necesario para poder construir un frente. Yo siempre confío en la responsabilidad de todos mis compañeros", agregó. Además, aclaró que "la unidad en el peronismo no está en duda", y que él es "el primero que va a trabajar por la unidad". "No hay ninguna posibilidad de que nos separemos, no le vamos a dar de comer a los que no quieren a la Argentina", puntualizó. Por último, al ser consultado sobre un posible encuentro con la vicepresidenta y el ministro de Economía, Sergio Massa --algo que le vienen pidiendo hasta sus más íntimos colaboradores-- dijo que "no está previsto, pero no tengo problema de reunirme con quien haya que reunirse".
Una de las posibilidades es que el mandatario no asista a la reunión en Ferro. En los Congresos anteriores sí estuvieron los presidentes del partido, como fue el caso de José Luis Gioja en 2019. Sin embargo, cuando el presidente del PJ era el expresidente Néstor Kirchner, tampoco asistía. El presidente del Congreso del PJ, en tanto, es Gildo Insfrán. Uno de los gobernadores que está en la mira de la Corte, en connivencia con Juntos por el Cambio. La oposición también quiere suspender en esa provincia las elecciones pautadas para el 25 de junio. JxC, de hecho, ya presentó dos amparos ante el máximo tribunal para lograrlo. Por ese motivo, entre otros, el fallo de la Corte que suspendió las elecciones en Tucumán y San Juan --a los cargos de gobernador y vice-- serán parte de un posible documento final.
Más allá que desde los diversos sectores insisten con que el encuentro de hoy es una mera formalidad y que "luego habrá que tener una mesa política para acordar las demás cuestiones", la instancia es clave porque allí se deberá resolver quiénes van a ser los encargados que deberán sentarse a discutir el armado del frente y cuáles serán las reglas de juego. El 14 de junio vence la presentación de las alianzas, entonces se espera que el peronismo pueda comenzar a definir en alianza con qué partidos irá a los comicios. El Frente Renovador, liderado por Massa, por su parte, está planificando un encuentro partidario antes de la primera quincena de junio.
El 10 de junio, en tanto, será la fecha límite para presentar los sellos. Una posibilidad es que el Frente de Todos cambie su nombre, pero --aunque la idea comenzó a circular-- no se especula con que haya que definirlo hoy. Por otra parte, como cada frente es el que elige de qué manera se conforman las listas, hay que ver si el oficialismo decide, por ejemplo, repartir internamente los cargos por sistema D´Hondt. Ese también podría ser un tema de debate, al igual que los pisos, y, a la vez, si habrá alguna especie de "código de convivencia", para, en caso de que haya PASO sean "lo más fraternas posibles". Es una idea que propuso el jefe de gabinete, Agustín Rossi.
Rossi, junto con el vicejefe de gabinete, Juan Manuel Olmos, y el ministro del Interior, Eduardo "Wado de Pedro", sostuvieron encuentros durante las últimas semanas para intentar arribar a ciertos acuerdos básicos en torno al Congreso, sin embargo, los resultados de esas reuniones no fueron conocidos. Desde algunos sectores del peronismo creen que el escenario está "muy desordenado" y que "nadie esperaba que llegáramos al Congreso sin un orden previo". A la vez, admiten que es muy difícil abordar la situación sin "un ordenamiento que venga desde arriba", y sin un encuentro entre los principales referentes del espacio.
Mientras tanto, las peleas internas y las posturas contrapuestas en el FdT siguen a cielo abierto. Tanto Rossi, como el embajador en Brasil, Daniel Scioli, insisten con que es necesario que el oficialismo vaya a internas. También se manifestaron en esa línea actores de diversos espacios como el dirigente social, Juan Grabois. Scioli volvió a insistir ayer al decir que “no hay ninguna razón para no discutir abierta y democráticamente qué es lo mejor y cuáles son las mejores soluciones para resolver nuestros problemas. Y esto sólo las PASO nos las pueden dar". Massa, en las antípodas, señaló la semana pasada que "sería un gravísimo error exponer en una primaria las diferencias de la coalición".
A la espera de una definición de su referenta y líder, el kirchnerismo está terminando de organizar el acto del 25 de mayo. El miércoles, un día después del Congreso partidario, habrá una reunión en la sede porteña de SMATA, donde las agrupaciones que se referencian con la vicepresidenta cerrarán los detalles de la convocatoria. Aún es una incógnita si CFK asistirá y, en tal caso, si hará allí algún anuncio. Tanto ella, como su hijo, el diputado Máximo Kirchner, dejaron en claro en sus últimos discursos que, más allá del candidato, lo que el peronismo debe definir para estas elecciones es "un programa de gobierno".