Ya no será más la última de la tabla

Desde Santa Fe

La resolución del Tribunal Electoral que se conoció el martes empoderó a 84.220 jóvenes de 16 y 17 años para que puedan votar por primera vez en una elección provincial, que este año se reparte entre las primarias del 16 del julio y la general del 10 de septiembre. “Es una sentencia importante para nuestra provincia, la sacamos del último lugar de la tabla”, dijo ayer uno de sus autores y presidente de la Corte Suprema de Justicia, Daniel Erbetta. La ironía sobre la rezagada se entiende: Santa Fe fue la última provincia de la Argentina en ampliar los derechos políticos de los adolescentes, reconocidos en el resto del país desde 2012, hace una década. “Removimos una discriminación bastante fea” para ese colectivo porque “parecía que un joven de 16 y 17 años de Santa Fe tenía menos capacidad que otro de la misma edad de Córdoba, la ciudad de Buenos Aires o la provincia de Buenos Aires”. “Y ante este tipo de situaciones discriminatorias, la función de los jueces es tratar de removerlas. Eso es lo que hicimos”.

Erbetta explicó ayer por emisoras de Rosario y Santa Fe las claves de la sentencia, en la que coincidió con los dos vocales del Tribunal: los jueces de Cámara Alfredo Ivaldi Artacho y Armando Drago y el procurador general de la Corte, Jorge Barraguirre. “Una decisión unánime, muy sólida y que tiene fundamentos en normas de la Constitución de Santa Fe”.

Los nuevos electores incorporados al padrón son 84.220, según confirmó el presidente de la Corte. La cantidad surge de comparar dos datos. En el padrón nacional ya estaban inscriptos 2.817.787 santafesinos y santafesinas. En el provincial, 2.733.567. La diferencia son los 84.220 jóvenes de 16 y 17 años que -antes de la sentencia- ya podían votar en las elecciones nacionales (en las PASO del 13 de agosto y en la generales del 22 de octubre) y ahora también podrán hacerlo en los comicios locales (en las PASO del 16 de julio y la general del 10 de septiembre).

“El padrón es el mismo”, remarcó Erbetta. Y es el que se utilizará en las cuatro elecciones, por lo tanto, la inscripción de electores de 16 y 17 años en los registros provinciales será automática.

“Esto nos permite resolver un segundo problema que estaba en debate, que es el supuesto costo de los padrones electorales”, dijo Erbetta quien rechazó el intento de la justicia federal de cobrarle a la provincia 55 millones de pesos por ese servicio -y al final del planteo- el costo resultó cero. De 55 millones a cero. “Que paradoja”, comentó ayer el magistrado. “Ahora, ya no habrá ningún problema porque el padrón que se va a usar es el mismo, con los mismos electores que tienen las elecciones nacionales, con las mismas mesas y los mismos domicilios. De modo que si la justicia federal tenía algún trabajo que hacer para ajustar el padrón de la Nación a la provincia (sacar de las listas a los 84.220 jóvenes de 16 y 17 años) ya no necesita hacerlo porque el padrón será exactamente el mismo”, agregó.

Habilitar el voto joven en Santa Fe “nos permite zanjar una discriminación bastante fea que teníamos en la Argentina. Los únicos jóvenes de 16 y 17 años de todo el territorio nacional que tienen derecho a elegir el Presidente de la Nación pero que no podían elegir gobernador o al intendente de su pueblo donde desarrollan su vida, su convivencia, eran los de Santa Fe”, insistió Erbetta.

“Por lo tanto, frente a un planteo por dos legisladores (la diputada Agustina Donnet y su colega Rubén Giustiniani) y una denuncia de ilegitimidad constitucional, dictaminó el procurador (Barraguirre) y el Tribunal resolvió el caso. Hemos hecho lugar a la posibilidad de que los jóvenes de Santa Fe tengan los mismos derechos y la misma capacidad política que tiene cualquier otro de la misma edad en el resto del territorio argentino para poder elegir las autoridades. Es un tema importante institucionalmente para nuestra provincia, la sacamos del último lugar en la tabla y reivindicamos más construcción de ciudadanía, que es una constante y una necesidad permanente en la lucha por los derechos”, ironizó.

En 2012 el Congreso reconoció el voto joven en las elecciones nacionales. “Todas las provincias argentinas incorporaron este criterio a los comicios locales, de modo que los jóvenes no solo podían elegir presidente y autoridades nacionales, sino también gobernadores, legisladores provinciales, intendentes y concejales. La única que quedó rezagada en el contexto nacional fue Santa Fe. Y eso planteaba una situación de no igualdad jurídica. Desde 1789, la Declaración de los Derechos del Hombre dice que todos los hombres tienen los mismos derechos y garantías. Ahora serían mujeres y hombres. Por lo tanto, este un tema que la provincia necesitaba ajustarlo. El Estado provincial estaba en deuda con los jóvenes de 16 y 17 años”, así que reconocerle el “derecho al sufragio es muy positivo en términos éticos” y jurídicos.

Que los chicos y chicas de esa edad puedan votar en las elecciones locales en todo el país, menos en Santa Fe, era “una discriminación bastante fea. Parecía que un joven de 16 y 17 años de Santa Fe tenía menos capacidad que uno de la misma edad en Córdoba, en la ciudad de Buenos Aires o en la provincia de Buenos Aires. Y este tipo de situaciones discriminatorias es función de los jueces tratar de removerlas”. Es lo que hicimos. “No se pudo hacer antes por ley, bueno, se planteó el caso ante el Tribunal Electoral de Santa Fe, que lo resolvió”.