De la ilusión a la frustración hay pocos pasos. Y los hinchas de Vélez parecen haberlos recorridos todos. Porque la llegada de Ricardo Gareca al banco fortinero encendió una luz de esperanza en Liniers durante los primeros partidos pero el rendimiento del equipo decayó y hace ocho partidos que no conoce la victoria. Ese mal momento futbolístico también se trasladó al aspecto dirigencial ya que algunas agrupaciones recolectaron firmas con el objetivo de adelantar las elecciones.
Según informó la organización "Primero Vélez" -que agrupa distintas agrupaciones opositoras- la recolección de firmas alcanzó el número necesario por estatuto para convocar a una Asamblea Extraordinaria y en el transcurso de esta semana presentarán formalmente el pedido a la Comisión Directiva comandada por Sergio Rapisarda para que dentro de los próximos 30 días se lleve a cabo. Una vez que se realice, las agrupaciones pedirán la renuncia de la actual comisión y exigirán que se adelanten las elecciones, pautadas para noviembre de este año.
En tanto, la actual conducción fortinera apuntó contra la iniciativa opositora, al considerarla que "pone en riesgo" la democracia del club. Eso sí, no aclaró cómo actuará en consecuencia con el pedido de Asamblea Extraordinaria.
Gareca quiere pelearla
Luego del empate con Central -y con la mira en el partido contra Racing- Gareca que no pretende dejar su cargo en el club y quiere quedarse “a pelearla”, a pesar de la mala campaña que el equipo está desplegando en el torneo de la Liga Profesional de fútbol (LPF).
“Quiero quedarme a pelearla. No me pongo plazos” expresó el DT bonaerense, de 65 años, luego del empate sin goles con Rosario Central, por la 16ta.
Gareca, quien asumió la conducción en un partido con Platense (1-1) en marzo pasado, hizo autocrítica y adujo “no estar al margen de todo esto”. “Nos trajeron para dar soluciones y no las estamos dando”, apuntó el exDT del seleccionado de Perú.