La Justicia de Familia de San Lorenzo otorgó la adopción plena de una joven de 18 años a sus tíos. La chica fue quien pidió el trámite, tras convivir desde que nació con el matrimonio conformado por el hermano de su madre biológica y la esposa de éste. Al nacer, su madre se la entregó a su hermano por las dificultades que tenía para criarla. Luego de varios años, la propia joven instó a sus padres de crianza a iniciar el trámite para la adopción y para su cambio de identificación. El juez Marcelo Scola declaró "inaplicable" el artículo que prohíbe la adopción de vínculos filiales ascendientes a descendientes. Al alcanzar la mayoría de edad, la chica se presentó ante el juez y le afirmó que quiere que se otorgue la adopción a favor del matrimonio con quien siempre vivió.