El Museo de la Memoria y la Secretaría de Género y Derechos Humanos, junto al Centro Cultural Parque de España, llevarán a cabo la señalización en homenaje a los militantes Eduardo Germano y María Cristina Pagnanelli, mañana martes a las 11 en la esquina de Colombres y Bv. Argentino, en Fisherton.
En el lugar donde se inaugurará la señalética fueron asesinados el 26 de diciembre de 1976, los dos jóvenes de 18 y 23 años, quienes se encontraban detenidos desaparecidos en el centro clandestino de detención del ex Servicio de Informaciones, a cargo del entonces jefe de policía de Rosario Agustín Feced, durante la última dictadura militar.
A través de los aportes de testigos se pudo saber que Eduardo y María Cristina fueron secuestrados el 17 de diciembre de 1976 en Rosario y, tras soportar torturas durante su cautiverio, se fraguó un enfrentamiento con explosivos frente a la estación transformadora de energía de Fisherton para ocultar sus asesinatos.
En el diario La Capital del 28 de diciembre de 1976 se publicó la noticia bajo el título “Fueron abatidos dos terroristas”, en la que se transcribe una información oficial del Comando del Segundo Cuerpo de Ejército sobre el "procedimiento" que terminó con la vida de la pareja. El documento forma parte de la muestra Contradesaparecido del fotógrafo Gustavo Germano, hermano de Eduardo, y la diseñadora gráfica Vanina de Monte, que se encuentra exhibida en el Museo de la Memoria hasta el próximo domingo 28 de mayo.
La coproducción del Museo de la Memoria de Rosario y Centro Cultural Parque de España narra en imágenes la historia de vida del joven dirigente estudiantil y militante político, su desaparición forzada a manos de las fuerzas de seguridad y los 38 años de denuncia que siguieron hasta el juzgamiento del caso en mayo de 2020.
Como se cuenta en la señalética colocada, los restos de María Cristina fueron entregados a su familia pocos días después de los hechos. Tras años de investigación de la familia Germano, organismos estatales y de derechos humanos, se determinó que el cuerpo de Eduardo fue enterrado como NN en el cementerio La Piedad. Finalmente, sus restos fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense y restituidos en 2014. Tres de los represores involucrados en este caso recibieron condenas en 2020.
La señalización forma parte del Programa de Marcas de Memoria de la Dirección General de Derechos Humanos y Memoria que tiene como objetivo principal visibilizar en el espacio público las huellas de las memorias políticas, sociales y culturales de la ciudad.