El partido de derecha del primer ministro saliente, Kyriakos Mitsotakis, se impuso este domingo en las elecciones en Grecia, pero ante la falta de mayoría absoluta apunta a unos nuevos comicios para gobernar solo. El partido Nueva Democracia (ND), en el poder desde hace cuatro años, obtuvo el 40,8 por ciento de los votos, superando por amplio margen al partido Syriza del exjefe de gobierno Alexis Tsipras, quien recibió el 20,1 por ciento de los sufragios, con el 87 por ciento del total escrutado.
A pesar de este claro triunfo, ND no podrá gobernar en solitario, objetivo manifestado por Mitsotakis, ya que carece de la mayoría absoluta necesaria. "Los ciudadanos quieren un gobierno fuerte con un horizonte de cuatro años", afirmó este domingo el primer ministro de 55 años, quien agregó que "el terremoto político de hoy nos llama a todos a acelerar el proceso para una solución definitiva de gobierno".
Por su parte Alexis Tsipras, de 48 años, también se manifestó a favor de unos nuevos comicios, al señalar que "el ciclo electoral aún no está terminado". Tsipras había apelado al dirigente socialista Nikos Androulakis con vistas a una posible alianza en caso de obtener resultados favorables, pero este formuló una serie de exigencias. En caso de que el ganador no pueda formar gobierno, tal como predicen muchos analistas, se convocarán nuevos comicios a fines de junio o principios de julio.
Los comicios del domingo se celebraron con un nuevo sistema electoral proporcional que elimina el premio de hasta 50 escaños al partido más votado, pero en la repetición que se presenta ya como muy probable se volverá a introducir esa bonificación. En esos nuevos comicios, a ND le bastaría conseguir el 37 por ciento de los votos para gobernar con mayoría absoluta.
Tsipras, líder del partido Syriza, que en 2015 encarnó la esperanza de la izquierda europea, urgió al país a "pasar la página de cuatro años difíciles". La pérdida de poder adquisitivo a causa de la inflación y los bajos salarios sigue siendo un dolor de cabeza para muchas familias, después de una década de crisis y rescates financieros internacionales. La deuda pública del país mediterráneo de la Unión Europea continúa siendo de más del 170 por ciento de su PBI, y la inflación rozó el año pasado el diez por ciento.
A fines de febrero, una catástrofe ferroviaria que costó la vida a 57 personas, entre ellas numerosos estudiantes, suscitó manifestaciones masivas contra el gobierno conservador, acusado de negligencia en materia de seguridad. Mitsotakis, hijo de un antiguo primer ministro y tío del actual alcalde de Atenas, se vio también salpicado de lleno por un escándalo de escuchas ilegales a responsables políticos y periodistas.