El Borussia Dortmund tenía este sábado la Bundesliga servida en bandeja, pero no pudo ante Mainz en el Signal Iduna Park al igualar 2-2 y no logró romper con la hegemonía del Bayern Munich, que a su turno le ganó 2-1 al Colonia y se consagró campeón en una atractiva definición.

El equipo amarillo, con ganar o con que no haga lo propio el equipo de Baviera, podía dar la vuelta olímpica. Pero desde un principio lo que parecía una tarde soñada se tornó una pesadilla: primero Andreas Hanche-Olsen abrió el marcador y tras un penal errado de Sebastien Haller apareció Karim Onisiwo para poner el 2-0 parcial para la visita. En paralelo, Bayern Múnich ganaba 1-0 gracias al tanto de Kingsley Coman.

El complemento fue distinto. Con un Borussia Dortmund totalmente enfocado en atacar, pudo conseguir el descuento de la mano de Raphael Guerreiro, que sembró ilusión en todos los presentes.

Esta esperanza fue aún más real cuando por casi 10 minutos (del 35 al 44), el Dortmund fue parcialmente campeón dado que Dejan Ljubicic empató el partido para Colonia; aunque Jamal Musiala marcó para el Múnich sobre la hora para que la Meisterschale se quede con el conjunto bávaro.

De poco sirvió el gol de Niklas Süle en el minuto 50, dado que sólo la victoria le servía al Dortmund para dar la vuelta olímpica junto a sus fanáticos.

Bayern Múnich se quedó con la Bundesliga por undécima vez consecutiva con 71 puntos, misma cantidad que Borussia Dortmund, pero gracias a su mejor diferencia de gol logró la consagración que parecía improbable en la previa.