En un partido de bajo relieve y pocas emociones Defensa y Justicia y Racing se repartieron el dominio del terreno y el manejo de la pelota (un tiempo para cada uno), y sellaron un 1-1 que se ajusta bastante al balance de los 90 minutos.

El conjunto dueño de casa se puso en ventaja a los 37 minutos, tras un grueso error de Moreno, aprovechado por Barbona para habilitar a Alanis, quien tocó suave de zurda sobre la salida de Arias. 

En el primer tiempo hubo otras llegadas del equipo de Varela: un remate de Sant'Anna y otro de Nicolás Fernández que se fueron desviados cerca de los palos, y ninguna disparo al arco de Racing, que se acercó muy poquito, a velocidad y potencia mínimas hasta los pagos de Unsain. Hasta ahí estaba plenamente justificada la victoria de los locales, que le daban un mejor tratamiento a la pelota ante un rival sin ideas en el medio ni solidez defensiva.

El Racing del campeonato, el que últimamente no pega una, el que tiene más goles en contra que nadie, empezó a parecerse al de la Copa Libertadores (está puntero en su grupo), cuando en el arranque del segundo tiempo Defensa y Justicia se quedó con 10 jugadores por la expulsión de Escalante, por doble amarilla.

Sin juego, pero con mucho empuje empezó a arrinconar a su rival, lo puso contra las cuerdas y encontró a los 65 el golpe justo para el empate, con un cabezazo de Moreno tras un centro de Mura. 

Lo gritó con todo el volante de Racing, porque con esa conquista lograba limpiar la mancha del pase que dio origen al gol de Alanis. El mismo Moreno estuvo a punto de lograr el desequilibrio con un remate desde el borde del área, que parecía tener destino de red, pero fue desviado por Malatini. Hubo además un buen disparo de Hauche que encontró una buena respuesta de Ursain. 

Los locales, por su parte, no dieron muchas señales de vocación ofensiva en esa segunda mitad, y se limitaron a tratar de ponerle freno a los embates de los volantes y delanteros de Racing. El partido quedará muy pronto en el olvido.