Rusia bombardeó este lunes la capital ucraniana a plena luz del día, pocas horas después de que Kiev sufriera un ataque récord con 40 drones bomba. Al mismo tiempo, varias aldeas rusas de la provincia de Belgorod recibieron el fuego intenso de la artillería ucraniana.
Varias explosiones se escucharon en Kiev durante el ataque masivo del que, por ahora, se informó de una persona herida, según escribió el alcalde capitalino, Vitali Klitschko en su perfil de Telegram. Varios fragmentos de misil cayeron en distintos distritos de Kiev como Obolonski, cerca de una estación de servicio. Y también en los sectores de Desnianski y Dniprovski, en un parque.
El del domingo fue el peor ataque en intensidad sobre Kiev, pero no en daños: los sistemas antiaéreos entregados por los aliados occidentales protegen la capital y habrían alcanzado un nivel de eficacia muy alto. De los 59 drones disparados contra objetivos urbanos en todo el país, la Fuerza Aérea ucraniana aseguró haber derribado 58.
En otra tanda de bombardeos en el oeste del país, las autoridades ucranianas admitieron que los ataques alcanzaron una instalación militar en la región de Jmelnitski, según una de sus escasas declaraciones sobre blancos militares impactados. A contramano de la versión ucraniana, Rusia aseguró haber bombardeado aeródromos en Ucrania y destruido todos los objetivos.
Ucrania denunció la modalidad rusa de ataques diurnos, mucho más riesgosos para los civiles. El jefe de la administración militar de Kiev, Sergii Popk, escribió en Telegram: "Después de prolongados ataques, únicamente nocturnos, Rusia golpea ahora una ciudad pacífica durante el día, cuando la mayoría de sus residentes estaban en el trabajo o en la calle".
La gente corría a refugiarse en una estación del metro en el centro, mientras se oían las explosiones. Muchos residentes se habían acostumbrado a ignorar las sirenas, pero los numerosos ataques de este lunes sembraron el pánico. Rusia intensificó sus bombardeos contra la capital ucraniana desde principios de mes, pero hasta ahora eran casi siempre durante la noche.
Bombas sobre Belgorod
Ucrania devolvió el golpe: un bombardeo masivo se desató el lunes por la mañana en Shebekino y algunas aldeas cercanas en la provincia rusa de Belgorod, informaron varios testigos a los canales rusos de Telegram. Shebekino, cerca de la frontera con Ucrania, también fue bombardeada durante el fin de semana, con un civil muerto y tres heridos, incluida una niña de 15 años.
A las 10 horas locales del lunes, los residentes de Shebekino y los pueblos de Murom y Novaya Tavolzhanka recibieron una nueva alarma a través de un mensaje de texto, invitándolos a refugiarse en las habitaciones subterráneas. En otro sector del frente de batalla, Rusia logró repeler un nuevo ataque ucraniano en la región de Zaporiyia, bajo control ruso, después de que las tropas de Kiev trataran de entrar en la localidad de Lobkove.
Dinamarca apoya a Ucrania
El gobierno de Dinamarca anunció su intención de invertir 2.400 millones de euros entre este año y el que viene, en un fondo destinado a apoyar militarmente a Ucrania. El presidente ucraniano Volodimir Zelenski agradeció al gobierno y al Parlamento danés esa decisión. El canciller ruso, Sergei Lavrov acusó a las autoridades de Dinamarca y Países Bajos de querer entrenar a pilotos ucranianos para el uso de los cazas F-16 para "complacer" a EE.UU. y encajar en su línea política sobre asuntos europeos.