El Parlamento de Italia aprobó esta semana una serie de enmiendas de un proyecto de ley aprobado por el Gobierno de Giorgia Meloni en febrero que busca penalizar a los italianos que recurran a la práctica del alquiler de vientres en otros países para tener un bebé.
El proyecto propuesto por la coalición de derechas que gobierna el país desde el pasado octubre promueve la criminalización de quienes recurran a esa práctica reproductiva por fuera de las fronteras italianas, para volverla "un delito universal".
En Italia, el alquiler de vientres -también conocido como subrogación de vientres- es un delito a partir de una ley de 2004. Se castiga con penas de cárcel de hasta dos años y multas de hasta un millón de euros a "quien, en cualquier modo, realice, organice o patrocine la comercialización de gametos o embriones".
En este sentido, la enmienda aprobada el miércoles en la Comisión de Justicia de la Cámara de los Diputados prohíbe a "los ciudadanos italianos" hacer uso de los "vientres de alquiler" también en el extranjero "para obstaculizar toda práctica que pueda configurarse como un tráfico comercial de niños".
Este es el primer "sí" parlamentario al proyecto de ley de Meloni, que se espera que llegue al pleno de la Cámara de los Diputados el próximo 19 de junio para después pasar al Senado para su aprobación definitiva, que se da por descontada por la mayoría de la derecha.
Los partidos en la oposición, como el socialdemócrata Partido Demócrata (PD) o el populista Movimiento 5 Estrellas, votaron en contra, alegando que el proyecto es contrario a la Constitución y no tiene en cuenta a los niños, entre otras justificaciones.
La secretaria del PD, Elly Schlein defendió la maternidad subrogada, aunque reconoció que se trata de un tema "delicado y denso" que requiere de un debate profundo en el seno de la formación.
Por el contrario, la ministra para la Familia, la Natalidad y la Igualdad de Oportunidades, Eugenia Roccella, defendió que la posición del Gobierno es "clara y de absoluta condena a toda forma de maternidad subrogada por ser lesiva de la dignidad de las mujeres y los derechos de los niños".