Trabajadores mineros de la empresa Borax llevaron a cabo una protesta en la ruuta nacional 51, a la altura de Campo Quijano en reclamo de una suba salarial que les permita cubrir los gastos de la canasta básica familiar y por condiciones aptas de higiene y seguridad.
Celso Tolaba, uno de los representantes de esta protesta, contó que salieron a la ruta 51 a visibilizar su situación. Los trabajadores se apostaron en la ruta el miércoles y siguieron hasta el viernes, aunque no realizaron cortes.
Tolaba es un obrero y explicó que junto a sus compañeros autoconvocados iniciaron este reclamo, sin el apoyo de la Asociación Obrera Minera Argentina. "Es una manifestacion pacífica, haciendo conocer la situación". La manifestación se hizo durante las horas diurnas de los tres días.
"No nos sentimos representados por el sindicato. El secretario general (Eduardo Gerónimo) no atiende, no recibe reclamos. Así estamos en este país, los gremios no quieren recibirnos", manifestó Tolaba. El referente gremial tampoco respondió la consulta de Salta/12.
El obrero explicó que un trabajador con 20 años de antigüedad percibe ingresos de $230.000, mientras que los que recién se incorporan ganan alrededor de $135.000, con los que no llegan a cubrir los gastos de la canasta básica. La jornada de trabajo es de 12 horas diarias, por quince días seguidos, y descansan otros 15 para retornar de nuevo.
Tolaba dijo que están pidiendo que se hagan convenios con las empresas "para poder nosotros agregar ítems, para poder subir el sueldo. Lo que más nos preocupa es el sueldo". Contó que el anterior secretario general del gremio, acordó que los mensualizaran y a partir de allí perdieron los ítems que corresponden, por ejemplo, al pago doble de los días feriados y los fines de semana.
Mientras en la provincia las mineras se instalan con las promesas de trabajo y "desarrollo", Tolaba señaló que "todos hablan del boom de la minería pero nadie fiscaliza cómo estamos en temas de seguridad y sueldos". "Si hicieran un censo, se darían cuenta como estamos padeciendo", añadió.
"Nos están vendiendo la provincia, a costa de que los mineros estemos mal pagados, y que se enriquezcan algunos funcionarios y nada más", expresó el obrero. Dijo que no es sólo la empresa Borax, sino "toda la minería de Salta está mal pagada".
Los trabajadores enviaron notas al presidente de la Cámara de Minería, Carlos Rampos; al Sindicato AOMA en Buenos Aires; al gobernador Gustavo Sáenz, al senador Omar “Topo” Ramos, y al diputado e intendente electo Lino Yonar. Ninguno había contestado hasta el momento en que Tolaba conversó con este medio.
Los obreros tampoco han conseguido dialogar con la patronal, y tampoco intervino la Secretaría de Trabajo de la provincia ni el Ministerio de Trabajo de Nación.
Borax tiene dos minas, Tincalayu y Sijes, en San Antonio de los Cobres, departamento Los Andes, donde extraen borato. En los dos yacimientos trabajan 120 personas, algunas son oriundas de la misma Puna y otros provienen de diferentes lugares de la provincia tales como Rosario de Lerma, Campo Quijano, y la capital salteña.
Tolaba explicó que en estas mineras está en curso una transición que consiste en la transferencia de propiedades de litio y regalías de Bórax a Allkem, a cambio de los derechos de extracción de borato a favor de la empresa Santa Rita.
El obrero dijo que la empresa Santa Rita es de la familia salteña Hadad. "En julio empiezan a manejar el barco. Como empleados exigimos al sindicato que haga reuniones, pero no se presentaron porque estaban en transición", manifestó.
Según indicó, la familia Hadad también es dueña de la empresa Santa Rita de borato en Campo Quijano, de otra en Olacapato que explota ácido bórico y de Mina Patito, que extrae ulexita en El Salar del Centenario.
El borato es un mineral "multiuso". Con él "se hacen cartones, reglas, plásticos, fertilizantes. Se exporta la mayoría de los que se produce, no queda en Argentina", señaló el obrero, quien desconoce cuánto cuesta una tonelada, qué cantidad se exporta y las ganancias que generan para los empresarios con su mano de obra.
Tolaba dijo que en las plantas además no están "bien seguros" porque los equipos con los que cuentan son viejos y reciclados de otra planta. Asimismo, indicó que en Sijes, duermen 5 personas en un misma habitación y tienen un sólo baño, que no está en buenas condiciones, también comparten frazadas y almohadas porque "no alcanzan".
Además, contó que desde el año pasado reclamaban por el estado de los camiones y máquinas, que tenían 25 años y representaban riesgos para los obreros y recién este año los están renovando.
Tolaba dijo que reciberon el apoyo de obreros de las distintas empresas, las de los mismos dueños y también de las de litio y oro, que según el obrero, también tiene bajos sueldos pero no protestan por miedo a represalias.
"En Mina Lindero (de oro) y Río Tinto (de litio) mostraron el descontento del secretario gremial que tenemos ahora. Los mismos compañeros de Mansfield están tratando de cerrar paritarias y no les quieren dar el 35%. Si se están llevando el oro tienen que repartir mejores salarios, las de litio tambien, están en proyecto, (los trabajadores) tendrían que estar cobrando bien", manifestó Tolaba.