El peronismo santafesino no puede evitar entusiasmarse con la pelea que acontece enfrente. Desde la primera fila los precandidatos de Juntos Avancemos observan con detenimiento cómo Carolina Losada y Maximiliano Pullaro ingresaron en un camino que para los dirigentes más experimentados de uno y otro lado, no tendrá retorno de cara a las generales de septiembre. Aunque, también es sabido que en política hoy por hoy, se vuelve casi de cualquier lado. Pero no es gratis que la senadora Losada haya caracterizado a su contrincante interno de “personaje oscuro” de la política y lo haya relacionado no sólo con el “narcotráfico” sino también con el “fracaso” de su gestión como ministro de Seguridad durante cuatro años: “Ya estuvo en gestión y chocó la calesita”, le dijo la precandidata que todos los días se encuentra con algún nuevo video en redes en el que le recuerdan que “vive en nordelta”, “no conoce Santa Fe” y se la ve “laguneando” cuando responde en entrevistas a temas básicos de la realidad provincial.
Pero la explosión de Losada se relaciona para los conocedores, con los números que está viendo y que no son lo que se esperaba de un suceso electoral como el que ella misma fue en 2021 cuando resultó la candidata más votada de la provincia. El armado territorial de Pullaro le mete presión a las Paso de Unidos para Cambiar Santa Fe y la escalada en el enfrentamiento está dejando muy lejos de escena a la precandidata del socialismo. Es por eso que Mónica Fein desafió esta semana a un debate abierto a Losada y a Pullaro. Algo que difícilmente se dé puesto que la única que necesita esa instancia es la ex intendenta de Rosario que pugna por convertirse en “el mejor tercero” como en la Copa Libertadores.
Mientras tanto, el peronismo parece -como habitualmente se dice- un liceo de señoritas. No es que no vuele un zapato de tanto en tanto, pero todo es en el marco de una normalidad de campaña donde a medida que pasen las semanas se empezarán a diferenciar más y más unos de otros. Hasta un grupo de whatsapp se mantiene entre Marcelo Lewandowski, Marcos Cleri, Eduardo Toniolli y Leandro Busatto. Aunque todos reconocen que apenas “se intercambiaron unos saludos y otras pocas muestras de respeto” en esos mensajes cerrados y que ese grupo hoy se mantiene con casi nula actividad.
Lo cierto en este panorama es que el único candidato del gobernador Omar Perotti era Roberto Mirabella. Ninguno de los que está en carrera reivindica cercanía alguna con el gobernador. “Acá no hay jefes, lo que hubo fueron acuerdos para llegar a una estrategia electoral”, repiten cerca de Lewandowski que recibió los primeros dardos de Cleri por “el dilatado proceso de acuerdo” entre él y el gobernador que “no benefició para nada al peronismo”. Para todos los precandidatos del oficialismo, Perotti “es una parte más del esquema”, para dejar en claro que no será el conductor exclusivo de la campaña aunque su nombre vaya impreso al tope de la lista de candidatos a diputados provinciales.
Los más cercanos a Lewandowski señalan que el senador nacional adoptó recientemente una frase que infunde ánimos de cara a la interna y también para la general: “El peronismo siempre discute poder. no su supervivencia”.
Pero el esfuerzo discursivo mayor de los precandidatos está destinado a que trascienda a qué distancia se posicionan respecto de la gestión del gobierno provincial. Cargar las tintas en las metas que sí se alcanzaron y no involucrarse en los fracasos de la administración. Lo lógico y razonable para cualquier candidato del oficialismo.
“La ventaja es que nosotros veníamos marcando esas diferencias desde siempre”, aseguran en el entorno de Toniolli y subrayan sus diferencias principalmente en la agenda de la seguridad donde recalcan que Perotti “abandonó la idea de una reforma policial” y mantienen diferencias además en materia de la gestión en Educación. Este sector del peronismo también debe responder a los alcances de su acuerdo con la centroizquierda representada en Ciudad Futura; lo mismo que La Corriente que logró una de las internas más expectantes en Rosario con Roberto Sukerman y Juan Monteverde disputando quién de los dos será el candidato a intendente de ese espacio.
Las diferencias empiezan a bajar también a otras categorías. Norma López que encabeza la lista de Busatto a candidatos a diputados provinciales; no le dejó pasar ayer un tuit a Alejandra Rodenas que es primera en la lista de Cleri. “Desde 2015 #NiUnaMenos demuestra la fortaleza de las mujeres y disidencias a la hora de defender nuestros derechos”, escribió la vicegobernadora mientras se desarrollaba la marcha del 3J que fue multitudinaria en Rosario. “El Senado que presidís hace tres años en la provincia de Santa Fe tiene frenada la Ley de Educación Sexual Integral”, le recordó López.
También en los armados territoriales se libran las batallas peronistas. Lewandowski exhibe musculatura en esa dirección al presentar que su trabajoso acuerdo con Perotti fue impulsado principalmente por jefes comunales e intendentes que lo respaldan y que, lógicamente, “trabajarán” su voto en los distritos. Pero Cleri acaba de sumar algunos respaldos importantes en ese sentido. Roly Santacrocce de Funes y Carlos De Grandis de Puerto General San Martín expresaron públicamente su apoyo a la precandidatura del diputado nacional kirchnerista.
El sector de Lewandowski tiene en claro que “esto no es una ley de lemas” en el sentido de que hay que sumar para la general no sólo los porcentajes de cada uno de los precandidatos peronistas sino que también hay que ampliar la base de votantes con el apoyo de “independientes y desilusionados del socialismo y hasta del radicalismo”, sostienen.
Por su lado, Busatto debe haber sido uno de los primeros críticos de la gestión Perotti desde el peronismo. Desde el inicio vio que casi no habría relación entre el Ejecutivo y el bloque de diputados provinciales que él preside. Pero sus señalamientos son bien profundos cuando sostiene que “al peronismo productivista de Perotti hay que sumarle el peronismo redistributivo. Si no, de qué sirve ser la provincia más rica. Si se sostienen amplios bolsones de pobreza”, ha dicho desde los inicios y lo promueve en su campaña.