En medio del debate por las candidaturas principales en la Ciudad de La Plata, el concejal Juan Manuel Granillo Fernández se convirtió este lunes en el primer precandidato a intendente de la capital provincial desde el espacio que, en el armado oficialista, tiene como referente a la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz.

Se trata de un dirigente del peronismo que desde hace tiempo trabaja con la ex diputada nacional. Tras ser confirmado como precandidato, llamó a la militancia a "ir a buscar a todos los vecinos que se sienten abandonados por el impresentable e insensible intendente Julio Garro”. "Vengo caminando la ciudad desde hace muchos años, el espacio viene recorriendo cada barrio y cada casa y nos merecíamos tener un representantes compitiendo en la ciudad”, aseguró el concejal. Como ya contó BuenosAires/12, el resto de los sectores peronistas que tiene como principal figura provincial al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, camina y espera que las decisiones a nivel nacional acomoden el panorama. Nadie en La Plata espere que la candidatura de Granillo Fernández se termine convirtiendo en una pieza de unidad del espacio. Sin embargo, es la que oficialmente, largó primero.

Ante lo que considera una “indefinición” respecto a las candidaturas en la Provincia, el objetivo de Tolosa Paz parece ser el de avanzar en un proceso de instalación para empujar sus chances de formar parte de un armado principal del oficialismo bonaerense, empujado siempre por la estrategia nacional en la que ya tomó posición por la precandidatura presidencial de Daniel Scioli. "Debemos ampliar nuestro frente, en todo el territorio bonaerense tendremos referentes y candidatos, y en nuestra querida ciudad iremos todos con un compañero y referente que viene preparándose hace muchos años y que tiene la capacidad de llevar adelante esta enorme responsabilidad", dijo la ministra tras anunciar a su candidato en el distrito que ella misma intentó gobernar en el año 2019.

La experiencia de la última elección no trae buenos recuerdos para la actual ministra. En 2019, perdió la interna frente Florencia Saintout en una contienda que se definió por un margen pequeño, pero la sumatoria que había dejado al Frente de Todos como el espacio más votado en las PASO no se trasladó a la contienda general, que terminó otorgándole la reelección a Garro. Vale recordar que en aquel momento, el Frente de Todos tenía otros tres precandidatos, entre ellos Guillermo Escudero, que se ubicó en el tercer lugar en aquella interna y cuyo nombre también sonaba como un posible aspirante desde el sciolismo. En total, habían sumado más de 198 mil votos en la primaria, número que se redujo a unos 182 mil en la elección general. El intendente, en cambio, paso de casi 156 mil a 216.700. Y todo eso con los gobiernos de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal en caída libre.

Ahora, Tolosa Paz pide pista para quedarse con la candidatura a la gobernación. Y a pesar de que Axel Kicillof ya dijo que trabaja por continuar durante cuatro años al frente de la oficina principal de la Casa de Gobierno ubicada en La Plata, la ministra cree que su candidatura no está del todo cerrada. No por los apoyos que se multiplican a favor del mandatario sino por una teoría que maneja respecto a la estrategia nacional del kirchnerismo. "La única que sabe contra quién voy a competir en Buenos Aires es Cristina", dijo en una de las entrevistas que durante la semana pasada le sirvieron para intentar mover el amperímetro en la interna peronista bonaerense.

Para conseguir el objetivo que, al menos en un principio, aparece como central, Tolosa Paz choca contra las intenciones del peronismo territorial que se posiciona en contra de la contienda interna. A veinte días del plazo establecido por la Justicia Electoral para confirmar la nómina de candidatos que participarán de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) a nivel nacional y en la Provincia de Buenos Aires, varios dirigentes bonaerenses empiezan a afianzar su posición respecto a la necesidad de llegar al 13 de agosto con una lista de unidad que le permita a los candidatos del espacio imponerse en la elección que marcará un piso electoral y anímico que consideran estratégico para encarar la campaña rumbo a la contienda general. Sobre todo en la Provincia, donde no hay ballotage. Por el momento, tampoco hay fecha.

Este lunes, el ministro de Trabajo, Walter Correa, ratificó que su espacio al interior de la CGT, la Corriente Federal de los Trabajadores, "prefiere una lista de unidad" del Frente de Todos y expresó su preferencia por el ministro del Interior, Eduardo 'Wado' De Pedro, como candidato a Presidente, y para Kicillof como aspirante a la reelección. No obstante, "si tiene que haber PASO, eso sería una cuestión secundaria, se aceptarán", aclaró.

En la misma sintonía se expresó el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, que anclándose en el futuro de la Provincia, señaló al gobernador como el dirigente que tiene "más posibilidades" de ganar y destacó que Kicillof "tiene el apoyo" de los jefes comunales para avanzar en su campaña reeleccionista. "El Frente de Todos (FdT) tiene que estar unido" para ganar la próxima elección y, "si no hay consensos que puedan sintetizar, tendrá que haber una PASO", dijo en una entrevista con Radio Provincia en la que dibujó el mapa nacional oficialista de la siguiente manera: "por un lado está (Daniel) Scioli y, por otro, (Sergio) Massa y 'Wado' (De Pedro)". “Si hay competencia, espero que no haya desgaste”, afirmó.

Garro espera

Al igual que una buena parte del peronismo, el intendente Garro sólo tiene claro que quiere ir por un tercer mandato. A menos de tres semanas para el cierre de listas todavía ni siquiera sabe con quiénes contará para armar su equipo y a quienes tendrá en vereda de enfrente en caso de que las internas, hasta ahora inevitables, se conviertan en una realidad. La semana pasada, Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli lo visitaron en La Plata y desde allí ratificaron que “defenderán” a los intendentes del PRO que quieran ir por un nuevo mandato. Esa decisión, se incomoda con la insistencia de Patricia Bullrich de sostener la candidatura del senador provincial Juan Pablo Allan, que expone un gran despliegue en la capital con el objetivo de ganarle la candidatura a Garro y convertirse en el candidato oficialista para sucederlo.

Dentro del PRO, Daniel Lipovetzky todavía sostiene su precandidatura, y en el abanico de Juntos por el Cambio también se espera por una definición del radical Sergio Panela. A nivel provincial, la UCR ya designó a los encargados de negociar hacia adentro de la alianza en territorio bonaerense. Se supone que las posibilidades estratégicas se analzarán también en el marco de los movimientos nacionales que defina el partido centenario que tendrá su convención en los próximos días para oficializar, como ya se hizo en Buenos Aires, su pertenencia a Juntos por el Cambio. 

Con el armado nacional en ebullición, Garro espera que las definiciones generales terminen favoreciendo a sus intenciones de “zafar” de la contienda previa. Este fin de semana, Diego Santilli aceptó que el sector que representa podría aceptar la propuesta para que los intendentes vayan “colgados” de las dos listas provinciales y nacionales, como estrategia para evitar los enfrentamientos en los armados de gobierno del cambiemismo.

Al oficialismo platense, además, lo moviliza otra de las candidaturas ya confirmadas para la ciudad, la de la diputada nacional Carolina Píparo. Quizás una de las referencias liberales con mayor exposición pública a nivel nacional, la presencia en el cuarto oscuro de una boleta encabezada por Píparo preocupa por el alcance entre el electorado antikirchnerista, una referencia que sirve de base primaria para la vida de Juntos por el Cambio. La situación podría complicarse más si el gobernador decide que las elecciones generales sea en el mismo día que las nacionales y que el arrastre del voto de Javier Milei termina beneficiando el desembarco de una propuesta libertaria con anclaje local en la capital de la Provincia.