La Justicia de Mendoza pidió la captura de una mujer acusada de abusar sexualmente, junto a Juan “Cacho” Garay, a la expareja del humorista, Verónica Macías, desde el 2011 al 2013. Según la denuncia, ambos la forzaban a tener sexo con ellos y también a participar en orgías presuntamente junto a empresarios, bajo amenazas con armas de fuego y aplicando diferentes formas de tortura.
La acusada, identificada como Sandra A., empleada de la Legislatura provincial desde 2020 y ex reina departamental de la Vendimia de Tunuyán en 1982, “junto al humorista, organizaba y participaba activamente de las orgías en las que era obligada a participar Macías”, consta en la denuncia.
Garay, que se hizo conocido en 2000 por su participación en Videomatch junto a Marcelo Tinelli, está en prisión domiciliaria desde hace poco más de un mes, por los delitos de amenazas, abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad
Este lunes, la Policía allanó la casa de Sandra A. —amante de Garay— pero no la encontró, por lo que se emitió una orden de captura. Según los investigadores, Sandra A. está de licencia de vacaciones hasta el 16 de junio, y si bien hay un registro que indica que salió del país el lunes 29 de mayo con destino a Chile, recientemente compartió fotos en redes sociales desde Playa de Carmen, México. Durante el operativo se secuestraron teléfonos, cámaras y computadoras que pueden ser de interés para la causa, ya que algunos de los abusos habrían sido filmados.
En la denuncia, según medios mendocinos, la presunta víctima describió una situación en la que la acusada le practicó sexo oral y luego la obligó a tomar varias pastillas para favorecer que otros involucrados pudieran abusar sexualmente de ella.
Macías también relató que, en 2013, en una vivienda de Luján, luego de ser abusada por Garay y Sandra A., llamó a su hermana que reside en Córdoba y la acusada entró a su habitación, le sacó el teléfono y lo estalló contra la pared, mientras le habría dicho a Garay: “Hay que matar a esta pendeja”. Acto seguido, la habría tomado del cabello, la tiró al piso y le habría propinado algunas patadas, para luego tirarle un balde de agua fría, llevarla a la ducha y darle dos tranquilizantes.
“La víctima era abusada por ambos y era obligada a participar en orgías sexuales, también era sometida a torturas con picanas eléctricas y baldazos de agua fría”, ratificó Agustín Magdalena, uno de los abogados de Macías, en declaraciones televisivas. A su vez, aseguró saber quiénes eran los partícipes de esos ataques, pero prefirió no revelarlos hasta que la Justicia avance con imputaciones. “Es gente importante. Son empresarios y gente conocida por la sociedad mendocina”, agregó.
La situación de Cacho Garay
Garay se encuentra en prisión domiciliaria, imputado por el fiscal Daniel Carniello, por los delitos de amenazas agravadas por el uso de arma, abuso sexual con acceso carnal en un número indeterminado de hechos, y privación ilegítima de la libertad agravada por ser cometida contra su ex cónyuge, Macías. Además, por el delito de tenencia de armas de fuego de uso civil.
La semana pasada, el imputado violó la prohibición de acercamiento que le impuso la Justicia, al realizar una llamada telefónica a su ex mujer, aunque no emitió palabra alguna y sólo se escuchó sonido ambiente, por lo que se lo imputó por desobediencia.
Tras incluirse este delito de desobediencia, los abogados de Macías, tanto Magdalena como Cristian Vaira Leyton, presentaron un escrito ante el Juzgado Penal Colegiado 1, con el fin de que se convoque una audiencia en la que se discuta si el acusado tiene que volver a la cárcel.