Para colmo de males en Juntos por el Cambio, Javier Milei anunció que se le acabó el amor con Patricia Bullrich y le asestó un revés a una eventual alianza entre ambos. Luego de un largo coqueteo de campaña, dijo anoche que ya “es muy tarde” para pensar una fórmula conjunta y sentenció que la fuerza de la que ella es parte está “condenada al fracaso”.
"Es muy tarde”, afirmó Milei con tono de despecho. “Estamos muy cerca del armado de las listas, tengo una buena relación con la señora Bullrich, y además le tengo aprecio, igual que al señor Mauricio Macri, pero parece que es muy tarde", respondió al ser consultado sobre si el largo acercamiento que mantuvo con la exministra de Seguridad se podría concretar.
El enojo del ultraconservador líder de La Libertad Avanza tuvo que ver con el novelón que se desató en la coalición de derecha, con la provincia de Córdoba como epicentro y la figura de Horacio Rodríguez Larreta como propiciador de la incorporación de dirigentes de experonistas como Juan Schiaretti.
Milei contra Juntos por el Cambio
"No negocio con los fracasados que hundieron el país", sentenció para sumarle fuego a la crisis interna de JxC desatada por la idea de Larreta y de Morales, ambos precandidatos presidenciales del PRO y de la UCR, respectivamente, de sumar a esa coalición al cordobés Schiaretti.
"Yo les avisé que iban a ser traicionados por esa gente. Un tipo que traiciona una vez traiciona siempre", dijo sobre Larreta y lo acusó de “estar dispuestos a hacer cualquier cosa con tal de estar en el poder”. Le endilgó “problemas de ego, de codicia y de lujuria” y luego apuntó sus cañones contra el gobernador jujeño:
"El señor Morales, con 34 años viviendo del Estado. Larreta, 30 años viviendo del Estado. (Elisa) Carrió, desde la democracia y desde antes porque estaba con la dictadura, (el senador nacional y precandidato a gobernador cordobés Luis) Juez, que es un camaleón porque fue kirchnerista, fue todo. Son los que hundieron el país, es lo que siempre dije".
También hizo lugar para la líder de la Coalición Cívica, a quien defenestró haciendo una mezcolanza de todo con todo: "Cambiemos se juntó con los inviables de los radicales, con Carrió, que es más inviable que los radicales porque es un desprendimiento por izquierda de los radicales, y las palomitas, los tibios, que son kirchneristas de buenos modales pero tienen las mismas ideas, que creen que porque lo dicen bien y son más prolijos son distintos, pero son la misma cosa".
El enojo del ultramontano no llegó hasta allí, sino que avanzó contra toda esa fuerza a la que alguna vez se acercó: "Ni pisaría Juntos por el Cambio, porque es una estructura condenada al fracaso; así fracasó la Alianza (1999-2001), que fue un rejunte para ganar; fue exitosa para eso, pero un desastre gobernando".
Luego de despacharse con unos y otros, vaticinó: "Si entro en la segunda vuelta (electoral) voy a ser el próximo
Presidente".