"¿Azúcar o edulcorante?". En la mesa de un bar, en un café de especialidad, en la sobremesa familiar, una reunión con amigos o en el trabajo, es la pregunta clave cuando se sirve cualquier infusión. Los endulzantes no azucarados ocupan un lugar destacado en las alacenas de millones de personas, en especial en las últimas décadas, al calor de recomendaciones de reemplazar el azúcar por edulcorantes o endulzantes.
Sin embargo, esto podría llegar a su fin, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendara en mayo de 2023 la sustitución de los endulzantes no azucarados debido a múltiples efectos adversos. Página|12 consultó a nutricionistas para ahondar sobre los motivos de esta decisión y despejar una duda: cuál es el reemplazo ideal del edulcorante.
Las banderas rojas del edulcorante
La nutricionista Adriana Hamer explicó a Página|12 que si bien esta investigación de la OMS aportó muchos más elementos sobre los efectos del edulcorante, hace años que le recomienda a sus pacientes.
Los motivos tienen que ver con las banderas rojas que hay alrededor de estos productos: “Esto porque afecta negativamente la desintoxicación hepática alterando la expresión de la Glucoproteína-P”.
Y añadió: “Tiene otros perjuicios. Como inflamaciones a nivel de los órganos, microbiota intestinal alterada. Eso sí nos trae una peor calidad de vida”.
Qué se debe hacer
La pediatra y médica especialista en nutrición Nancy Buschenbaum destacó que “lo que desaconseja la OMS es el uso para el tratamiento del sobrepeso por no efectividad”.
“Aconseja, en tanto, bajar el consumo de manera condicional y no definitiva. Si no, lo hubieran prohibido los organismos como Anmat o la FDA por seguridad”, comentó
Pero, con la mirada puesta en una mejor calidad de vida, sugirió "bajar el dulzor" que se consume en general, sea de azúcares como de edulcorantes no calóricos.
Ante el boom de consultas, transmitir tranquilidad
El informe, además, influye en especial para quienes no pueden consumir azúcar por cuestiones de salud. Emanuel tiene 31 años, es diabético y relata que el documento de la OMS le influyó para decidir reducir los edulcorantes. "Yo los sigo consumiendo", aclara a Página|12. "La recomendación de mi médico es utilizarlos, yo consumo stevia, la uso para el mate o cuando cocino algún postre, pero sí decidí bajar la cantidad", sostuvo.
En este sentido se expresó también la nutricionista Macarena Monteverde, que si bien consideró que el mejor camino a seguir para dejar los edulcorantes es volcarse por los sabores naturales de los alimentos, buscó llevar tranquilidad ante el boom de consultas que recibió de sus pacientes.
“Le recomiendo a los pacientes hacer una disminución progresiva, no que lo eliminen. Dado que la OMS lo que sugiere es que, no solo por el uso de edulcorantes, se logra reducir el peso. Está claro que hay acompañarlo de una dieta adecuada reducida en calorías y actividad física”, apuntó.
Y añadió: “Los pacientes me consultaron mucho al respecto, dado que fue noticia en todos los medios. Mi respuesta fue informarles y transmitirles tranquilidad. La OMS emite recomendaciones firmes y condicionales. Esta es una recomendación condicional”.
El reemplazo ideal del edulcorante
Finalmente, Hamer explicó por qué el reemplazo ideak de los edulcorantes es volver al sabor original de los alimentos y aprender a utilizaros para potenciar sus características.
“El reemplazo ideal es no utilizar edulcorante. De lo contrario, incorporaría, por ejemplo, cáscara de naranja o limón, canela, aceite de coco o escamas en las preparaciones”, surgió.
Y continuó: “Para endulzar un café, por ejemplo, se puede poner un poco de canela o vaina de vainilla. O de los frutos secos procesados. El coco rallado también. Le pones una pizca y está bueno. En carnes se puede usar la manzana. En tortas, la banana”.
Qué dice la OMS sobre los edulcorantes
La OMS desaconsejó hace unas semanas el uso edulcorantes no azucarados para controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles (ENT), como enfermedades cardiovasculares, algunos cánceres y la diabetes.
La recomendación se basa en los resultados de una revisión sistemática de la evidencia disponible, que sugiere que el uso de edulcorantes no azucarados no confiere ningún beneficio a largo plazo en la reducción de la grasa corporal en adultos o niños.
Al contrario, puede haber posibles efectos indeseables de su uso a largo plazo, como un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos.
Cuáles son los edulcorantes no azucarados más comunes
Entre los edulcorantes no nutritivos más comunes, según la OMS, se encuentran el acesulfamo-K, el aspartamo, el advantamo, los ciclamatos, el neotamo, la sacarina, la sucralosa, la estevia y los derivados de la estevia.