Inmediatamente después de que el futbolista Neymar lanzara su nuevo proyecto de crear un crucero personalizado llamado “Neymar en Alta Mar”, ("¡Serán 3 días y 3 noches de mucho atrevimiento y alegría, celebrando todo lo que más le gusta a nuestro Ney fuera de las canchas!", escribió la página oficial del brasilero), las redes sociales se revolucionaron. Tanto que, a menos de cumplirse las 24 horas de su lanzamiento, los cupos para el crucero ya estaban completamente agotados.
Este súbito éxito deportivo y no el vil billete (léase dólares cara grande), como se dijo por ahí, llevó a Peligro de Wolf a tentar a algunos empresarios turísticos argentinos para que armen tours, cruceros y otros circuitos turísticos alrededor de la figura de ciertos futbolistas argentinos de renombre.
El primer crack con el que se nos ocurrió crear un crucero fue, claro está, Lío Messi: “Me Lío de Janeiro” se llamaría, recorrería las costas brasileñas con la Pulga y Antonella a la cabeza recreando la icónica y romántica escena de “Titanic”, y 500 hinchas-turistas argentinos en cubierta dando vida al “Andá pa’ allá bobo Fest” y cantando sin parar aquello de “Brasil decime que se siente”.
La idea era buena, pero no pudo ser. El embajador argentino en el país vecino, el “Pichichi” Scioli, nos pidió que ni lo intentáramos y sin mucha diplomacia nos sugirió que nos dejemos de romper los… protocolos del Mercosur.
¿A quién acudimos entonces? Al amigo de Lío, al ahora influencer Kun Agüero, para ver si nos ayudaba a “influir” en la gente. Y creamos un atractivo crucero all inclusive a Cancún: “Viajá al Caribe Kun el mejor. Viajá a Can Kun en Crucero con el Kun Agüero. Morfi, chupi y living la vida loca junto al Crack del fútbol y su Dream Team. 6 días de joda corrida, stream y amor a la mexicana”. Tampoco pudo ser. Nos dimos cuenta que su actual novia, Sofía Calzetti, con quien el Kun se encuentra en Miami, “Calzó” al vuelo la propuesta y amenazó “Calzarlo” de una piña caribeña si aceptaba.
Fuimos probando nuevas fórmulas turístico futboleras: inventamos el “Fideo Tour por Los Ángeles con el Ángel Di María del gol”. Tampoco funcionó.
Probamos con “Hay mar con Aimar” con el Payasito en Mar del Plata y en Pinamar con el Jefecito Mascherano: “Este verano te convertís en héroe. Hay Mas Verano con Mascherano”. Casi nos convertimos en pobres. No anduvo.
Luego acudimos a la figura del capo de la AFA, concebimos el “Tour de Mar Chiquita con el ChiquiTapia”. Duró menos que el tano Daniele De Rossi en Boca. Se nos cayó el proyecto del “Barco de la Alegría” en San Bernardo con el pequeño juvenil astro xeneize, y ojalá funcione el único proyecto que nos queda en pie, el novedoso concurso “Y si armamos un Muñeco” en San Clemente del Tuyú, en donde haremos un concurso de estatuas de arena del Muñeco Gallardo. Se presagia un festival de bultos de arena. Esperemos que funcione. A cruzar los dedos.
