Verónica Macías, expareja de "Cacho” Garay, a quien denunció por abuso declaró en la causa por violencia de género por la que está detenido y con prisión domiciliaria en Mendoza. "Yo no cuento cuentos, digo la verdad, y la verdad duele", dijo la mujer a la salida del Polo Judicial Penal, luego de realizar una Cámara Gesell en el Polo Judicial Penal.

La expareja de Garay estuvo acompañada por sus abogados, Agustín Magdalena y Cristian Vaira Leyton. Al momento de hablar con la prensa, se la vio consternada y débil, e incluso en un momento perdió el equilibrio, por lo que debió ser asistida por uno de los abogados para no golpear contra el piso.

“Todo se va a demostrar en la justicia”, reiteró Macías, aunque se mostró un poco desanimada respecto a cómo se está llevando la causa. “Siento que no se me escucha lo suficiente para toda esta tortura que viví, siento que apañan mucho al señor que cuenta cuentos, y que ayer con su defensor decían ridiculeces”.

Consultada sobre su paso por el Polo Judicial, la mujer dijo: "Es demasiado doloroso todo lo que estoy viviendo, salgo recién de una cámara Gesell, donde tuve que contar muchas cosas que me duelen, demasiado doloroso para mí, como dije, yo no cuento cuentos, no hago estrategias como los defensores”.

En tanto, sobre la empleada de la Legislatura mendocina Sandra Astudillo Staffolani, a quien Macías denunció como cómplice de Garay, y que fue detenida el lunes pasado, sostuvo: “Es una mentirosa, una asquerosa, ojalá se pudra en la cárcel, ruego a dios que se pudran en la cárcel por todas las cosas que me hicieron”.

Por su parte el abogado Leyton se mostró disconforme con la designación de prisión domiciliaria para Garay: “Hay personas en Mendoza que por mucho menos de lo que está acusado el señor Garay transitan el proceso en una penitenciaria”.

Hoy el señor Garay – agregó el abogado- se hace el abuelito, como que tiene todas las enfermedades. En este punto interrumpió Macías a su abogado y dijo: “Para abusarme, para torturarme estaba lo más bien, para chupar, para meterme drogas y golpearme estaba perfecto”.

Finalmente, acerca de si hay otras personas involucradas dijo: "Que hay terceras personas involucradas, las hay. Hay que determinar quiénes son y qué grado de participación tuvieron también".

La causa contra Cacho Garay

Hasta el momento hay dos imputados, el humorista “Cacho” Garay, de 68 años, y la empleada administrativa Sandra Astudillo Staffolani, de 67, quien fue detenida la noche del lunes pasado en el aeropuerto Internacional de Mendoza, tras su regreso de sus vacaciones en Cancún, México.

Este martes, cerca del mediodía, el fiscal la imputó por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo en calidad de coautora”, por lo que, de ser encontrada culpable, arriesga una pena de 8 a 20 años de prisión.

Una vez que el fiscal le comunicó la imputación a Staffolani, su abogado solicitó el beneficio de la prisión domiciliaria, que fue aceptada por la fiscalía tras el pago de una caución de un millón de pesos y fijar un domicilio en la provincia.

A finales de abril pasado, Garay, quien está en prisión domiciliaria, tras la denuncia de su exesposa por violencia de género, recibió la prisión preventiva que le dictó el juez Juan Manuel Pina.