Las extorsiones que sufre una familia de zona oeste tuvieron esta semana un paso a la acción: el martes y el jueves sufrió tiroteos en el frente de la vivienda de México 148 y a pocos metros, en el portón de acceso al taller de pintura que es su sustento. “Una pesadilla terrible vivimos. No sé qué hacer. En diciembre me balearon la casa, me dejaron una bala y una nota pidiéndome 70 mil dólares. Me amenazaron por teléfono. Tuve custodia policial 30 días, pero eso terminó”, detalló consternado Jorge, de 73 años.

Esta semana, quienes extorsionan tomaron un nuevo impulso. "El martes 13 de junio a la mañana efectuaron siete disparos contra el frente de la casa y le dejaron una foto de mi familia. Y en la madrugada del jueves, a las 3.30, me avisó la policía que en un galpón que tengo a la vuelta me tiraron dos tiros. Ahí tengo un taller de pintura para fábricas terminales”, siguió el hombre. 

El daño se multiplica. “Tengo 16 empleados en el taller, tengo administrativos que no quieren venir a trabajar porque tienen miedo de que los baleen cuando entran o salen del taller. No sé qué hacer. Me mandaron fotos de mi familia y una nota donde me decían los nietos que tengo. Saben a qué escuelan van y me piden 10 mil dólares por cada nieto. Conocen todos mis movimientos”, subrayó Jorge.

Asimismo, señaló que tuvo custodia policial en diciembre pero se fue y que ahora, después de los últimos hechos, volvió. “Todo sigue igual. Me balearon un galpón que tengo como depósito. Mi caso lo tiene Fiscalía, que está investigando. Iré hoy a ver qué me dicen. No sé que hacer. Tengo un hijo que ya se fue de casa, se quiere ir del país con toda su familia, los otros me piden que cierre. No puedo cerrar porque tengo empleados, qué hago con ellos”, siguió.

Finalmente, advirtió que no tiene forma de conseguir el dinero que le piden, ni vendiendo todo. "Además, a quién le vendo todo esto. Los ataques quedaron grabados por las cámaras. Se ve a un enmascarado que bajo de una moto, sacó el revólver y efectuó dos tiros. En mi casa tiraron desde el medio de la calle, las balas pegaron en la planta baja y en la alta”, concluyó.