La Legislatura bonaerense ofreció una nueva foto que muestra la distancia que existe entre el oficialismo y la oposición. La Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires no pudo sesionar ante la negativa del bloque opositor a brindar el quórum necesario para abrir el debate. Según explicaron desde Juntos, el Gobierno provincial incumplió compromisos económicos con algunos municipios. Sin embargo, la ausencia en el recinto dejó trunca una sesión que incluía, entre otros temas, el tratamiento de once pliegos de jueces enviados por el Ejecutivo.

Para la presidenta del bloque del hasta ahora Frente de Todos, Teresa García, cada cosa debe enmarcarse en el ámbito que corresponde. “Los acuerdos de intendentes con el Ejecutivo responden a otra relación institucional, pero en el Poder Legislativo se discuten leyes”, señaló la legisladora a Buenos Aires/12.

Ante este escenario, la titular del Senado, Verónica Magario, mantuvo el llamado a la sesión y el bloque frentetodista ingresó al recinto para aguardar el tiempo reglamentario hasta que se cayó la convocatoria por la ausencia de la oposición. El Senado convive con una paridad absoluta de 23 bancas por lado. Esta condición vuelve muy engorrosa la posibilidad de acordar, cuestión que se ve claramente reflejada en que hubo una única sesión ordinaria en lo que va del año. El oficialismo necesita de Juntos para sesionar, y viceversa. De lo contrario no hay quórum.

Antes de las 15, horario previsto para el inicio de la sesión, ya había indicios sobre el accionar de la oposición. Dado que el temario de la jornada debía definirse en la reunión de labor parlamentaria programada para el jueves por la mañana, que no se llevó a cabo, el escenario no auguraba llegar a buen puerto en materia de consensos. 

Este mismo medio había contado, a principios de semana, que algunos legisladores olfateaban una caída de la sesión por el resquemor que generaron los once pliegos enviados por el Ejecutivo para la designación de jueces. El gobernador Axel Kicillof esperaba nombrar a once magistrados de paz en los departamentos judiciales de Bahía Blanca, La Plata, Mercedes, Morón, Necochea, Zárate-Campana y Trenque Lauquen.

Alejandro Rabinovich, el presidente del bloque de Juntos, fue la voz que comunicó la decisión de su espacio e hizo hincapié en que la decisión de no dar quórum no tenía que ver puntualmente con el tratamiento de los pliegos judiciales. “Sesionar cuando las cosas que se solucionan en el ámbito Legislativo no se cumplen desde el Ejecutivo no tiene sentido”, aseguró el marplatense. La acusación hacía referencia a las condiciones acordadas sobre la pérdida de ingresos que tuvieron algunos distritos de la oposición en relación al Coeficiente Único de Distribución (CUD).

El CUD es el índice que utiliza la Provincia para determinar el porcentaje de los ingresos coparticipables que le corresponden a cada municipio. También es el mecanismo utilizado para repartir la mitad de los recursos del programa Municipios a la Obra y el Fondo de Seguridad.

Para calcular este coeficiente se toman distintas variables que, en muchas ocasiones, son proporcionadas por los mismos ejecutivos locales. La población, la superficie y la capacidad tributaria son algunos de los indicadores. A su vez, el 37 por ciento del CUD es estipulado en base a estadísticas sanitarias del distrito, una información íntegramente aportada por los intendentes: ocupación de camas, la cantidad de consultas médicas, la cantidad pacientes que son atendidos por día, entre otros. Y aquí reside el principal inconveniente que afrontaron los gobiernos locales tras la salida de la pandemia, cuando las variables de salud fueron arribando a una nueva normalidad.

Con el fin de regularizar estos desajustes, en el presupuesto 2023 se decidió cambiar el mecanismo. Según explican desde la oposición, se acordó que en casos donde la disminución del CUD en un distrito de Juntos fuese superior al 5%, la Provincia compensaría el excedente. 

García señala que no deben mezclarse las condiciones y los reclamos. “Nada es suficiente motivo para no sesionar”, afirma la senadora y, en sintonía con esta lectura, apunta que aunque haya diferencias entre las posturas o visiones de las fuerzas políticas en la Cámara, “el recinto está para discutir”. Según pudo averigüar este medio, la decisión del bloque opositor, no fue producto de un pedido de los intendentes, sino que respondió a una estrategia parlamentaria del bloque. "No sé quién lo decidió", dijo un importante intendente consultado al respecto.

La decisión de no sesionar imposibilitó el avance de otras iniciativas como la Ley de Alquileres bonaerenses que esperaba adquirir estado parlamentario durante la jornada. El proyecto establece que no serán los inquilinos quienes deban hacerse cargo del pago de los gastos inmobiliarios y honorarios que exige la firme del contrato de alquiler con el propietario de la vivienda. Al respecto, Rabinovich afirmó que su posición y la del bloque macrista será la misma que el día de hoy: rechazo.