El gobierno oficializó la exención del aguinaldo de Ganancias y la modificación de escalas del monotributo, que beneficiarán a 5,5 millones de trabajadoras y trabajadores, a través de dos decretos publicados el jueves en el Boletín Oficial.
En el primer caso, se trata de un beneficio extraordinario por única vez para los trabajadores o jubilados que pagan el impuesto a las Ganancias, con el objetivo de recomponer el poder adquisitivo. La medida supone una mejora de bolsillo promedio por persona que supera los 110.000 pesos (es decir un 26 por ciento en promedio). En tanto, las escalas del monotributo fueron incrementadas en un 41 por ciento. Más de 500.000 personas se beneficiarán con la exención en Ganancias y unas 5 millones por las nuevas categorías del Régimen Simplificado.
Tal como había informado el ministro de Economía, Sergio Massa, la exención del medio aguinaldo del impuesto a las Ganancias regirá para los salarios o haberes brutos de hasta 880.000 pesos durante el período fiscal 2023. Asimismo, el gobierno determinó que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) deberá proceder a la devolución de las sumas retenidas en exceso en dicho año fiscal. Massa explicó la semana pasada esta medida que beneficiará a más de medio millón de trabajadores y trabajadoras sujetos a las retenciones de Ganancias, es decir quienes perciben salarios o haberes brutos mensuales de entre 506.230 y 880.000 pesos.
Por otra parte, el gobierno formalizó el aumento del 41 por ciento en las escalas del monotributo, a partir de julio. Esos nuevos valores regirán para la recategorización correspondiente al primer semestre del año. Massa también había anticipado esta medida la semana pasada, para el beneficio de "más de cinco millones de contribuyentes". Esto también representa una mejora en el poder de compra de las y los trabajadores, que esperan se traduzca en mayor consumo y actividad económica.
Según datos oficiales, actualmente existen 4.781.614 de monotributistas, de los cuales 2.894.352 pertenecen a la categoría A que es la de menores ingresos: a partir del primero de julio sus remuneraciones pasarán de 999.657,23 a 1.414.762,58 pesos anuales. En tanto, pertenecen a la categoría B unos 642.137 de contribuyentes: dentro de esta escala los ingresos brutos pasarán de 1.485.976,96 a 2.103.025,45 pesos anuales. Mientras pertenecen a la categoría C unos 359.565 aportantes y otros 350.964 son parte de la D, las remuneraciones brutas pasarán de 2.080.367,73 a 2.944.235,60 pesos en la C y de 2.583.720,42 a 3.656.604,33 pesos en la D.
La cantidad de aportantes en la escala E asciende a 180.989 contribuyentes, según datos de Afip, y en el caso de la F es de 185.074. Los ingresos brutos de la primera pasarán de 3.042.435,05 a 4.305.799,15 pesos y en la segunda de 3.803.043,82 a 5.382.248,94 pesos anuales a partir del primero de julio.
Por último son 107.562 contribuyentes en la categoría G, 49.608 en la H, 7.471 en la I, 2.575 en la J, y 1.317 en la K. En tanto, los ingresos brutos en la categoría G subirán de 4.563.652,57 a 6.458.698,71 pesos a partir de julio, en la H de 5.650.236,51 a 7.996.484,11 pesos, la I de 6.323.918,55 a 8.949.911,06 pesos, la J de 7.247.514,92 a 10.257.028,68 pesos y la K de 8.040.721,19 a 11.379.612,01 pesos anuales.