El cierre de campaña contra las presuntas mafias tuvo su cierre casi puntual antes del inicio de la veda electoral de cara a las PASO con la detención anoche de Enrique Quique Antequera, el administrador de la feria Urkupiña que funciona dentro del complejo de La Salada. Se lo acusa de integrar una asociación ilícita y junto con él cayeron tres hombres, uno de ellos miembro de la barra brava de Boca.
La detención de Antequera ocurrida en las últimas horas de ayer fue anunciada en las redes sociales por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. “Fin de la complicidad política delictiva, Juntos Nación y Provincia”, tuiteó la funcionaria sin hacer mención de los dirigentes políticos que estarían vinculados con el feriante.
Al igual que Jorge Castillo, el otro “rey de La Salada” detenido en junio pasado, Antequera tiene antiguos vínculos con la UCR de Lomas de Zamora. Su relevancia comercial como uno de los gerenciadores del complejo ferial más grande del país y el pequeño pero efectivo complejo de medios de comunicación y propaganda que allí funciona, lo convirtieron en uno de los más requeridos punteros de esa zona de Ingeniero Budge.
“Quique” fue uno de los hombres de Marcelo “Oso” Díaz en la zona del Riachuelo, donde funcionan Urkupiña (nombre de una de las advocaciones católicas de la virgen más veneradas en Bolivia), Punta Mogote y Ocean, las tres mega ferias. Díaz, mano derecha de Margarita Stolbizer desde que ésta se escindió del ala dura del radicalismo, lo apoyó en sus pretensiones de sentarse en una banca de la Legislatura bonaerense.
El empresario apresado ayer fue candidato a diputado provincial por el Acuerdo Cívico y Social, que hace menos de una década unió a Stolbizer con la ahora diputada de Cambiemos Elisa Carrió y la ministra Bullrich. Con esa experiencia, el empresario feriante aprendió a sembrar vínculos en otros sectores. En los últimos años se acercó al justicialismo pero fue desairado en sus intentos de candidatearse a intendente y legislador provincial.
En uno de sus últimos cruces de vereda se lo vio en abril pasado durante un timbreo de Cambiemos en la localidad de Banfield. Caminó durante varias cuadras con el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, según lo consignó el periódico local Diario Conurbano.
Ahora, Antequera fue señalado como miembro de una “mafia” dedicada al comercio ilegal y detenido junto con Roberto Ríos, Ramiro Saravia Rodríguez y Marcelo Aravena, estos dos vinculados a la barra de Boca Juniors, el club que dirige el macrismo desde 1995, cuando Mauricio Macri asumió su primer mandato.
La “caída” del denominado “segundo rey de La Salada” comenzó a madurar desde el 21 de junio, cuando su aparente competidor Jorge Castillo fue apresado acusado de asociación ilícita y extorsión, entre algunos delitos.
La detención de Antequera, a quien también se lo señala como dueño de un sector de los puestos instalados ilegalmente en las calles aledañas al predio cerrado que sí cuenta con habilitación, fue celebrada también por el gobierno de María Eugenia Vidal.
"Se terminó la complicidad política con el delito. Nación y Provincia trabajando contra las mafias", expresó Ritondo, quien conoce a Antequera de campañas electorales anteriores, tal como lo evidencian algunas fotografías que circulan en las redes sociales.
