Manoel, defensor de Fluminense, fue suspendido por la Conmebol tras haber dado positivo un control antidoping al finalizar el encuentro que su equipo goleó 5-1 en Brasil a River en el estadio Maracaná, por la tercera fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores.
El futbolista estuvo en el banco y no jugó ni un minuto, pero no pasó las pruebas antidopaje a las que fue sometido el pasado 2 de mayo en Río de Janeiro.
A Manoel se le encontró una sustancia llamada Ostarine, la cual es un compuesto químico que se utiliza para tratar la pérdida de masa muscular y la osteoporosis, pero todavía es objeto de investigación.
"Aunque se han explorado sus potenciales beneficios terapéuticos, la ostarine no ha sido aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos para uso médico. Esto ha llevado a que la Agencia Mundial Antidopaje la clasifique como una sustancia prohibida", explicó el medio Infowod acerca de la sustancia.
¿Qué hará River ante este caso positivo?
La idea de pedir los puntos por aquel partido se cruzó por la cabeza de la dirigencia de River, pero el caso es que reglamentariamente no está habilitado para hacerlo, ya que que para poder llevar a cabo esta acción los casos positivos deben ser masivos y con tan sólo un futbolista -que además no tuvo acción en cancha- no se puede anular el triunfo de Fluminense.
Sin embargo, mientras Manoel espera la audiencia del 28 de junio para resolver su situación, desde el club carioca esperan una contraprueba que destrabe la situación que lo complicaría para seguir disputando partidos de la Copa Libertadores, ya que podría sufrir una fuerte sanción por parte de la Conmebol.