Se trata de Brian Martino y Cristian Ramírez, quienes tomaban fotos de los allegados a la familia Verón que concurrieron al juicio oral, que se llevó a cabo en una sede de la Universidad de La Matanza.
Cuando un abogado de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) --querellante en la causa-- advirtió su conducta les pidió que se identificaran y en esas circunstancias revelaron que eran "efectivos de la Comisaría Primera de San Justo que llevaban adelante esa tarea por órdenes superiores".
El 23 de marzo pasado de 2023, el Juzgado Federal número dos de Morón, a cargo del juez Jorge Rodríguez, sobreseyó a ambos policías, pero la CPM apeló esa resolución y ahora la Cámara ordenó reabrir la investigación.
En agosto del año pasado, el policía bonaerense Ramón Ezequiel Benítez fue condenado a 21 años y ocho meses de prisión por el crimen del joven Lucas Verón, ocurrido el 10 de julio de 2020, en pleno aislamiento por la pandemia. Su pareja, la también policía Cintia Daiana Duarte, fue condenada a cuatro años de cárcel.
El día del hecho Lucas cumplía 18 años y con su amigo Gonzalo se reunieron a festejar en la casa de Verón, tras lo cual salieron en moto a comprar gaseosas y alguna bebida energizante.
Como no había nada abierto por el aislamiento por el coronavirus, ambos regresaron a la casa de Lucas, pero en ese momento se encontraron con un patrullero con las sirenas y luces apagadas que, según el joven que sobrevivió, los "quiso chocar".
"No nos dieron una orden de alto, nos asustamos y aceleró, era la primera vez que nos pasó algo así. Nos subimos a la vereda y el patrullero nos persiguió tirando cuatro tiros", dijo Aguirre al declarar en el debate.
Según le explicó al jurado, primero hubo dos disparos y luego otros dos cuando cayeron de la moto. A raíz de ello, Lucas murió mientras que Gonzalo sobrevivió al ataque.
Durante el juicio oral, en el que actuó un jurado popular, los dos policías --Brian Martino y Cristian Ramírez-- vestidos de civil y sin identificación, tomaron fotografías de los asistentes, especialmente de los familiares y amigos de Verón."El estado actual del expediente amerita emprender un curso investigativo que permita arrojar mayor información respecto del evento acaecido en el ámbito de la Universidad Nacional de La Matanza que motivó la formación de la presente causa", sostuvieron los camaristas Alberto Lugones y Néstor Barral, al reabrir el caso. En ese sentido, ordenaron "cotejar los extremos vertidos y documentos aportados por los encausados en el marco de su defensa material".