El gobernador  Omar Perotti pidió ayer a los medios de prensa una actitud distinta sobre la gestión política del estado:  "Sé que la atención se la lleva una bandera. Estaría bueno también que se transmitan otras cosas, porque si no hablamos solo del mensaje que quiso mandar alguien y se genera una amplificación de ese hecho. Esto no es casual, la Provincia da un salto con la tecnología más importante del país. No hay vuelta atrás. Es cierto que hay inseguridad, pero también hay pasos firmes para cortar con el delito", sostuvo en conferencia de prensa al hacer una breve referencia al trapo que desplegó la barra brava de Newell's el sábado pasado durante el partido homenaje a Maximiliano Rodríguez en el Coloso Marcelo Bielsa.

El gobernador también apuntó que la población "solo recibe cosas malas y parece que no se hace nada bueno, no hay equipamiento, inversión. Hay que ser cuidadoso, hay que analizar el rol que cumplen en esto los transmisores de mensajes". 

Es curioso el análisis del mandatario porque en rigor el último fin de semana , los rosarinos no tuvieron que asistir a la sangrienta lista de muertos en balaceras,  muchas veces teñidas por sus lazos con el narco. En verdad desde que Lionel Messi aterrizó por estas tierras, todo pareció haberse calmado: nadie podría afirmar con certeza que esto fue fruto de un acuerdo con quienes a diario desde los propios penales, ordenan crímenes para zanjar disputas territoriales, pero llamó la atención de fuentes políticas y judiciales contactadas por este diario. 

Ahora bien muchos podrá especular que la paz del fin de semana tiee que ver con el trabajo de los últimos tiempos de pesquisas, investigadores y policías, que dio sus frutos: por eso nos entiende como se les pasó una bandera para la cual se necesitan un centenar de persona para ser desplegada. De todos modos el trapo ya estaba en el estadio antes del show: eso muestra un video publicado en redes sociales por la empresa organizadora del homenaje a Maxi Rodríguez muestra que el trapo con los rostros de un mono, un toro y un pollo,  ya estaba en la tribuna popular del Coloso donde suele ubicarse la barra brava de Newell's antes del partido del último sábado. 

Por eso el ministro Brilloni, reafirmó que "no era efecto de control" porque "no había restricciones para el ingreso de banderas" , aunque en la previa otro funcionario de su cartera, el subsecretario de Seguridad Deportiva Gustavo Pucheta, expresó que el tratamiento era el mismo que el de un partido común y corriente. Para el club, no se controló lo suficiente.

Un compilado de imágenes publicado por la empresa WFG, a cargo de la organización del partido en el que se homenajeó a la Fiera en Rosario, deja en evidencia que el telón exhibido en el estadio del Parque Independencia estaba enrollado y listo para bajarse, junto a otras banderas utilizadas por la hinchada en cada encuentro del equipo, varias horas antes del comienzo del evento.

Brilloni aseguró ayer que vieron la bandera "cuando ya estaba desplegada" y se despegó de la responsabilidad de su cartera sobre los controles y requisas realizados antes del evento en la cancha rojinegra porque "no eran efecto de control". "Se había coordinado así con los organizadores, el club, la Municipalidad, con todos los actores. No teníamos que controlar banderas, hay un momento dentro de los controles que es la hora cero que no la tuvimos porque no hubo partido de fútbol", explicó.

Parado al lado del gobernador Perotti , Brilloni  aseguró que "el dispositivo de seguridad fue impecable. Ingresaron más de 42 mil personas al estadio y muchas otras quedaron afuera porque no tenían entradas o porque le vendieron entradas falsas y fueron estafadas. Todo se desarrolló en un marco de fiesta, donde el jugador (por Maxi Rodríguez) pudo ser agasajado por sus hinchas. Fue todo muy emotivo. Lástima el hecho de esta bandera que estamos investigando”, aseguró.

De todos modos hay que decir que dentro del estadio la mayor parte de la seguridad la llevaron adelante personal privado, y que la fuerza policial realizó un anillo perimetral para evitar problemas.