El empresario Francisco Sáenz Valiente quedó procesado por el “homicidio culposo” y la “facilitación de drogas” a Emmily Rodrigues, la modelo brasileña que hace casi tres meses murió tras caer del departamento del imputado. La Sala 6 de la Cámara del Crimen dispuso que Sáenz Valiente no cumpla prisión preventiva, pero sí la obligación de llevar una tobillera electrónica. 

La resolución la Sala 6 de la Cámara del Crimen, que elevó la calificación de la pena para el empresario del agronegocio y la minería, da por probado que Saénz Valiente estuvo involucrado en la muerte de Emmily, aunque quedó descartado el pedido de la querella, que solicitaba la carátula de femicidio o de homicidio con intención de ocultar un abuso sexual. La fiscalía también había solicitado otra calificación, la de “abandono de persona agravado por el resultado muerte”. 

Otro pedido de la querella y la fiscalía que fue rechazado por el tribunal fue el de la detención preventiva del empresario. Los camaristas Magdalena Laiño, Ricardo Matías Pinto e Ignacio Rodríguez Varela ordenaron que Sáenz Valiente lleve una tobillera con geolocalización, bajo el control de "Programa de Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica", dependiente del Ministerio de Justicia.

En otro de los puntos, los camaristas decidieron mantener las mismas medidas cautelares ya dictadas para Sáenz Valiente por el juez de la causa el 18 de abril. La  prohibición de acercamiento a los familiares de la damnificada y a los testigos que declararon en la causa, prohibición de salida del país, la obligación de asistir cada 15 días a la sede del tribunal y fijar un nuevo lugar de residencia distinto a la casa donde ocurrió el hecho.

La decisión de la Sala 6 de la Cámara del Crimen ocurre 24 horas después de que se conociera la incorporación de un peritaje clave a cargo de la Policía de la Ciudad en el que detectó sangre y semen en 25 muestras levantadas en preservativos, sábanas, acolchados y hasta en el corsé que usaba Emmily la noche en la que falleció al caer al vacío.

El hecho ocurrió el 30 de marzo pasado, cuando luego de cenar en un restaurante de la Costanera norte y de pasar por un bar de Palermo, Emmily llegó a las 3.21 con dos amigas al departamento de Sáenz Valiente, en el sexto piso del edificio de Libertad 1542, en Retiro, donde ya se encontraba una cuarta mujer.

Tras una madrugada de excesos con ingesta de alcohol, marihuana, cocaína y "tuci", Rodrigues  cayó desnuda por una ventana al patio interno del pulmón del edificio, cuando en el departamento solo estaban Sáenz Valiente y una de sus amigas.

Los estudios toxicológicos revelaron que, antes de caer al vacío, la modelo brasileña consumió alcohol (1.0 gramos en sangre fue el dosaje), cocaína, marihuana, ketamina y MDMA (uno de los componentes de la droga sintética "Tuci", la forma abreviada de llamar al "Tucibi" por la pronunciación en inglés de la sigla 2C-B, que es la mal denominada "cocaína rosa").

A Sáenz Valiente lo comprometen una serie de mensajes de esa noche con su dealer y con dos de las mujeres que fueron a su casa, donde les decía que tenía "tuci, faso y coca" en su departamento.