Posa en la puerta del Buffet de la Cámara de Diputados de la Nación Miguel López, que era el jefe del área. Miguel trabajaba desde muy joven en el Congreso, siempre en el mismo sector. En el epígrafe de esta foto, que se publicó el 3 de abril de 1926 en la Revista Caras y Caretas, se puede leer: “20 años de acción y profundo conocimiento de los hombres”. La nota, que ocupa tres páginas, versa sobre los gustos culinarios de algunos diputados. Sobre eso le pregunta el periodista a López, y por eso debajo de su foto se hace una referencia al conocimiento que tenía sobre cada uno.
Los afroargentinos trabajaron en la administración pública desde el siglo XIX. Existen numerosos casos que dan cuenta de este hecho. En 1927, al año siguiente de que se diera a conocer la foto de Miguel López, se publicó el libro Nuestro Antiguo Buenos Aires de Alfredo Taullard. Allí el historiador argumenta que la existencia de empleados públicos afroargentinos es una muestra de la ausencia de racismo en el país. Sin embargo, según señala el historiador de la Universidad de Pittsburgh, George Reid Andrews en el libro Los Afroargentinos de Buenos Aires, comenzando el siglo XX se les restringió “(...) a los niveles inferiores del servicio en el gobierno” [p.250]. También hay registros periodísticos de la Revista Caras y Caretas del año 1912 sobre esta limitación impuesta a los afroargentinos.