Un nene de tres años fue internado en el Hospital de Niños de Córdoba después de haber sufrido un ataque del perro pitbull de la familia, y como consecuencia de las heridas tuvieron que darle 25 puntos de sutura. El hecho ocurrió en la casa familiar del barrio Argüello de la capital provincial.
Según fuentes policiales, el suceso ocurrió a la madrugada, cuando el perro atacó al nene y la madre logró separarlo para evitar lesiones mayores. Enseguida, la mujer llamó al servicio de emergencias que le dieron los primeros auxilios.
La subdirectora del hospital, Analí Garnero, informó a los medios que la mordida afectó la parte derecha de la cara de la criatura. "Tiene lesiones superficiales en el pabellón ocular, mejilla y cuello", detalló la médica. En tanto, los padres del nene, dijero desconocer el motivo del ataque del perro a su hijo.
Como las mordidas de los perros suelen definirse como heridas "sucias" por estar contaminadas por la flora del animal, el nene quedó hospitalizado para ver cómo evoluciona. "Es importante brindar una adecuada curación con antibióticos para evitar una infección generalizada”, aclaró la doctora.
En tanto, la Justicia investiga lo ocurrido y la Patrulla Ambiental derivó al perro a una organización protectora de animales.
Otros ataques de pitbulls
En mayo, en La Plata, una nena de 10 años había sido atacada por un perro pitbull, que la siguió en la calle y de pronto saltó sobre ella y la mordió. Ese hecho ocurrió en el Barrio Aeropuerto, cuando la niña salía de un kiosco hacia su casa y fue sorprendida por el animal.
Los padres la llevaron de urgencia al Hospital de Niños de esa ciudad, y las heridas no eran graves. De todas maneras se abrió una causa penal contra los dueños del perro por "lesiones leves", que lleva adelante la UFI Nº 11 de La Plata.
En enero, también en Córdoba, una mujer de 66 años resultó gravemente herida tras ser atacada por su perro de raza Pitbull. "Su brazo derecho quedó amputado naturalmente", habían dicho los médicos, mientras luchan por salvarle el brazo izquierdo, en el que recibió varias mordeduras del animal.
Ese hecho ocurrió en una casa Alta Gracia, Córdoba. La mujer fue atacada cuando intentó separar a su propio perro de otro con el que se había trenzado en una pelea. Los médicos tuvieron que amputarle la mano derecha. Y probablemente debían amputarle la otra mano debido a la gravedad de las heridas que tenía en el brazo, con una fractura expuesta.
Tras el ataque, el pitbull fue trasladado al Instituto Antirrábico para realizarle estudios.