El fiscal penal de Salvador Mazza (ubicada en la frontera argentina, dentro del departamento San Martín), Armando Cazón, prevé imputar hoy a una mujer de 23 años por considerar que incurrió en el delito de “abandono de personas”, al haber dejado a sus tres niñes menores de 4 años solos en un espacio del basural de esa ciudad.
Sin embargo, desde la Secretaría de Niñez y Familia, que intervino después de la denuncia mediática, indicó que los datos colectados indican que la situación de las criaturas y de la familia no es de extrema vulnerabilidad, y que no hay necesidad de medidas de protección excepcional, es decir, alejamiento del grupo familiar.
El martes último cerca del mediodía, un periodista tomó las imágenes de tres niñes sentades sobre una cubierta en el basural. De la imagen surge que cerca de las criaturas había fuego. Los dos minutos del video fueron viralizados y en la tarde de ese mismo día, se supo que la madre y la abuela estaban a pocos metros reciclando latas y cartón.
Frente a los hechos, ayer se supo que el fiscal Cazón intervino y abrió un decreto de imputación contra la madre que tiene 23 años y deberá comparecer a la Justicia este mismo viernes.
“Se pudo verificar que se trataba de un niño de 4 años, una niña de 3 años y otra de 8 meses de edad, quienes se encontraban solos y en estado de vulnerabilidad por las condiciones del entorno”, indica el parte oficial del Ministerio Público Fiscal de Salta. A pesar de esa afirmación sobre que las criaturas estaban solas, luego el mismo organismo reconoce que la madre estaba en el lugar haciendo las tareas de reciclaje “y que todos se encontraban en buen estado de salud”.
Tras ser trasladada la madre junto a sus hijos a una dependencia policial, la causa fue radicada en el Juzgado de Violencia Familiar y de Género.
Sin medidas excepcionales
La secretaria de Niñez y Familia, Carina Iradi, indicó que desde la delegación de Tartagal se hicieron las diligencias del caso para averiguar las circunstancias del hecho. En primer lugar, afirmó que se trata de una familia de Bolivia que había venido a Argentina “por vacaciones” y decidió quedarse. Esto sucedió tras el nacimiento de la útima niña, por lo que se calcula que la familia está hace medio año en el país.
Iradi afirmó que ese día estaban la madre y la abuela de les niñes. “Indicaron que siempre se turnan para cuidarlos pero ese día fueron juntas y se llevaron a los chicos”, relató la funcionaria. Fue entonces que mientras hacían la recolección, el periodista vio a los chicos solos y expuso la situación a través de una filmación.
La familia reside con unos parientes radicados el país y su irregularidad sería en principio solamente referida a su situación migratoria. Sin embargo, tanto la madre como el padre tienen cumplen labores con ingresos, si bien sus fuentes de trabajo son de carácter informal.
Del relevamiento de la situación familiar, surgió además que se encuentran viviendo en una casa que cuenta con cuatro habitaciones, dentro de un amplio terreno. “Claramente se entiende que haya llamado la atención (la situación de los niños). Pero no es un caso que nos haya obligado a tomar una medida de protección excepcional”, insistió Iradi. La medida de protección excepcional implica la institucionalización transitoria del niño y las niñas en caso de no existir familia extendida que se pueda hacer cargo de elles.
Iradi afirmó que ahora se espera poder realizar las acciones conducentes a que la familia pueda regularizar su situación migratoria.
Un basural entre la población
Cuando se inició con el vertido de basura el lugar "estaba lejos del pueblo. Pero por las usurpaciones constantes quedó en medio de algunas poblaciones". Así lo explicó el interventor de Salvador Mazza, Adrián Zigarán, la presencia del basural en el que el niño y las niñas fueron filmades.
El vertedero se encuentra a unos tres kilómetros del pueblo en un paraje llamado Arenales. "Pero en algún momento fue tomado por la gente. Y los vecinos prenden fuego a la basura de manera permanente", detalló el interventor. Indicó que en algunas ocasiones se "corta la visibilidad de la ruta por el tema del humo. La gente que usurpó ahora no quiere que funcione el basural allí y es un inconveniente".
Zigarán añadió que la basura "se va enterrando por parte", pero se acumula mientras se espera concluir ese procedimiento. Al ser consultado sobre los planes para realizar una buena gestión de residuos, explicó que en Salvador Mazza como en Aguaray (en donde también fue interventor), "uno llega y el cementerio y basural están colmatados. Pero tampoco hay asfalto en la mayoría de las calles. Entonces hay otras necesidades".
Entre los proyectos, mencionó la posibilidad de disponer un vertedero entre Aguaray y Salvador Mazza para que ambas ciudades vuelquen sus residuos en ese lugar. Pero hasta el momento quedó solo en un plan, sin concreción. Y es que el lugar donde se haría este vertedero se encuentra a 20 kilómetros de cada una de estas localidades.