Tras ir dos goles arriba, Gimnasia La Plata se trajo este lunes un punto con sabor a poco del Parque Independencia al empatar 2-2 contra Newell's Old Boys para clausurar la jornada 22 de la Liga Profesional, que sigue teniendo como único puntero a River Plate.


En una entretenida primera etapa, los de Sebastián Romero se pusieron en ventaja por los tantos de Benjamín Domínguez y del capitán Cristian Tarragona, pero antes del descanso Guillermo Ortiz marcó el descuento.

En el complemento, el Lobo platense ya no tenía la firmeza de los primeros 45 minutos. El equipo de Gabriel Heinze venía avisando y en cualquier momento podía empatarlo. Primero llegó Aguirre, quien desde el sector derecho y tras un largo envío quedó de cara al arco, pero no pudo batir al arquero visitante.

El empate finalmente vino tras un corner para el Rojinegro: hubo un despeje y a continuación el tremendo zapatazo de Lisandro Montenegro, que le pegó como venía y desde fuera del área, para vencer la resistencia de Durso y desatar la alegría de una multitud presente en el Coloso Marcelo Bielsa.

El anfitrión parecía entonado y con ganas de más; sin embargo, el chico Lescano fue habilitado en la puerta del área rojinegra y la picó ante la salida de Hoyos, pero el balón salió desviado. Gimnasia perdía así una chance inmejorable de volver a ponerse arriba en el marcador y el resultado seguía abierto.

En los últimos minutos, el equipo platense empujaba y no se resignaba a dejar puntos en Rosario, sobre todo por la buena labor que había realizado en la primera parte.

Pero lo cierto fue que Newell's Old Boys casi se termina quedando con el premio mayor, primero con el ingresado Giani (que le tiró una masita a Durso) y luego -ya en tiempo adicional- con el tanto del paraguayo Recalde, que fue invalidado por offside previo de Ortiz. El pitazo final de Herrera le bajó la persiana a un duelo muy disputado y a la fecha 22 de la Liga Profesional.

De esta manera, el equipo del "Gringo" Heinze acumula ocho encuentros sin conocer la derrota, al tiempo que el Lobo platense lleva cuatro juegos sin poder ganar de visitante.