La empresa Meta, propietaria de Facebook, lanzará el jueves 6 de julio su nueva red social: Threads, que fue desarrollada para competir con Twitter, la plataforma que compró el magnate Elon Musk.
El anuncio de la compañía de Mark Zuckerberg se da poco después del malestar que causó en los usuarios de Twitter el aviso de la nueva medida del empresario sudafricano, que busca limitar la cantidad de publicaciones que se pueden leer por día en esa aplicación.
Mientras las quejas contra la red social del pajarito se multiplican, este lunes Threads comenzó a estar disponible en las tiendas de aplicaciones móviles de los sistemas operativos de iPhone y Android, para una compra previa antes de su puesta en marcha.
"Threads es donde las comunidades se juntan para discutir todo, desde los temas que nos preocupan hoy a los que serán tendencia mañana", afirma la descripción de la aplicación en estas tiendas.
La matriz de Facebook e Instagram había anunciado a mediados de marzo que estaba trabajando en una nueva red social, y por su descripción, parecía tener como objetivo convertirse en el competidor potencial de Twitter.
En otra descripción de Threads en la app, se especifica que permitirá "conectar directamente con tus creadores favoritos y otros que aman las mismas cosas, o construir unos seguidores fieles para compartir tus ideas, opiniones y creatividad con el mundo".
"Estamos pensando en una red social independiente y descentralizada para compartir mensajes escritos en tiempo real", señaló Meta en un comunicado.
Threads: ¿un riesgo para Twitter en la era de Elon Musk?
El lanzamiento de esta aplicación coincide con un período de incertidumbre en Twitter. Desde la compra de Elon Musk en octubre, que reestructuró la compañía, despidió a miles de trabajadores y puso una barrera de pago a muchas prestaciones de la red.
Justo el fin de semana pasado, el magnate generó fuertes reacciones entre los usuarios de Twitter al anunciar que la plataforma iba a limitar el número de mensajes que uno podía leer por día.
Según indicó en su cuenta oficial, en un tuit publicado el viernes pasado, "para abordar los niveles extremos de extracción de datos y manipulación del sistema” comenzará a aplicar “límites temporales” en esa red social.
“Las cuentas verificadas están limitadas a leer 6000 publicaciones por día; las cuentas no verificadas a 600 publicaciones por día y las nuevas cuentas no verificadas a 300 por día".
Horas más tarde actualizó esos números: "Los límites de tasa aumentarán pronto a 8000 para verificados, 800 para no verificados y 400 para nuevos no verificados".
El anuncio no especifica si ese recuento diario de tuits se aplica al seleccionar publicaciones concretas o abarca todas las publicaciones que aparecen, por ejemplo, al descender por la cronología de la pantalla principal, consultar hilos o revisar respuestas de tuits.
El límite para la gran mayoría de usuarios que no pagan la suscripción era de 1.000 tweets diarios.
El supuesto objetivo de esta medida es impedir que terceras empresas, especialmente desarrolladores de modelos de inteligencia artificial, usen los datos vertidos en la plataforma.
Twitter limitará la aplicación TweetDeck a las cuentas "verificadas"
TweetDeck, la aplicación de Twitter que permite a los usuarios monitorear cuentas simultáneamente, será reservada a usuarios "verificados" a partir del próximo mes, anunció la compañía de Elon Musk.
"Dentro de 30 días los usuarios deberán estar verificados para tener acceso a TweetDeck", informó el mensaje de la red social, que añadirá nuevas funciones al programa.
Los usuarios que quieren "verificarse" y contar con la tilde azul a la derecha del nombre de usuario deben pagar un abono de 8 dólares, excepto los que tengan cuentas ya verificadas como una cuenta auténtica según el régimen anterior, consignó la agencia de noticias AFP.
TweetDeck fue lanzado hace más de una década, y permite al usuario ordenar en su computadora las cuentas por temas, mediante columnas.
El fin de semana anterior numerosos usuarios se quejaron de que no podían acceder a TweetDeck, a lo que Twitter respondió que se debía a problemas técnicos. Esta semana el inconveniente fue resuelto, por lo que se puede acceder normalmente.