El reto de alcanzar la meta de "cero carbono" en las Islas Galápagos reunió a decenas de científicos y académicos para proponer una hoja de ruta de transición energética que permita adoptar una matriz compuesta íntegramente por energías renovables y no contaminantes.

El encuentro presentó las últimas investigaciones realizadas en torno a la iniciativa "Galápagos Living Lab for Energy Innovation", un espacio de acción creado en la cumbre mundial COP26 por la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), la Universidad de Edimburgo (Escocia) y la Cámara de Comercio Ecuatoriana-Británica.

Ubicadas a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador, las Galápagos son consideradas un laboratorio natural, el mismo que permitió al científico inglés Charles Darwin, en el siglo XIX, desarrollar su teoría sobre la selección natural de las especies.

Este archipiélago, formado por 13 islas grandes, 6 menores y 107 islotes y rocas, fue declarado como patrimonio natural de la humanidad de la Unesco en 1978 y es la segunda reserva marina más grande del planeta, considerada una de las mejor conservadas a nivel global, a la vez que la principal atracción turística de Ecuador. 

Reemplazar el diésel y la gasolina

Con unos 33.000 habitantes, las Islas Galápagos, la segunda reserva marina más grande del planeta y una de las mejor conservadas, recibieron el año pasado más de 267.000 turistas.

Hasta ahora la matriz energética de las Islas Galápagos se compone principalmente de la importación de diésel y de combustible del Ecuador continental, en su mayoría para abastecer a las embarcaciones que hacen actividades turísticas, mientras que le generación eólica y solar es aún muy minoritaria.

Entre los temas evaluados por los especialistas estuvo la evaluación de los sistemas de energía renovable para apoyar el suministro de agua, energía y alimentos y de la viabilidad para utilizar hidrógeno verde y motores eléctrico para las embarcaciones.

"El escenario perfecto" 

En la inauguración del encuentro participó el ministro de Ambiente y Transición Ecológica de Ecuador, José Antonio Dávalos, el viceministro de Energía, Marcelo Jaramillo, así como el rector de la USFQ, Diego Quiroga, y el director de la Universidad de Edimburgo, sir Peter Mathieson.

El ministro Dávalos advirtió que el cambio climático ha dejado de ser una amenaza inminente para convertirse en una realidad cuya única forma de enfrentar es juntos, "desde lo público y lo privado, junto a la academia y la ciencia".

Dávalos señaló que el Gobierno nacional ya está trabajando en el Plan Nacional de Transición hacia la Descarbonización y consideró que las Galápagos, consideradas un tesoro natural para el país, es "el escenario perfecto" para avanzar hacia ese objetivo con científicos y académicos.

Por su parte, Jaramillo recordó que el 2050 es la meta que se ha puesto Ecuador para dejar de usar energía de fuentes contaminantes y que en ese objetivo deben confluir tanto el sector público como el privado.

Fondos para las Galápagos

El "Galápagos Life Fund" (GLF), que administra acciones de conservación en el archipiélago ecuatoriano, definió algunas de sus líneas relacionadas con el impulso a proyectos ambientales, científicos y turísticos en esta reserva insular.

Dicho fondo, financiado con una operación de conversión de deuda por proyectos ambientales, tuvo una segunda reunión en la que su directorio también decidió socializar el proceso con la población de las islas, debido a la polémica que ha levantado esta estrategia.

El pasado 9 de mayo, el Gobierno del presidente conservador Guillermo Lasso anunció una operación de reconversión de un tramo de la deuda exterior del país, por el que convirtió 1.628 millones de dólares de pasivos comerciales en un nuevo préstamo de 656 millones.

Las autoridades explicaron que el fondo impulsará proyectos para fortalecer la conservación y uso sostenible del capital natural de las Islas, así como la gestión de sus reservas marinas. También financiará proyectos de pesca sostenible, planes de investigación científica y económica, de educación ambiental, de turismo sostenible y economía azul, entre otros.