Tras la muerte de Joaquín Sperani, el adolescente de 14 años asesinado por su amigo en la localidad de Laboulaye, Córdoba, se dio a conocer el resultado de la autopsia que reveló que el pequeño recibió 18 golpes en la cabeza.
La autopsia fue realizada este lunes por la forense Ana Laura Peiovich y detalló que Joaquín falleció a causa de un traumatismo de cráneo y sufrió un daño encefálico que le provocó la muerte inmediata, luego de recibir golpes en la cabeza.
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Ante esto, el niño de 13 años, que sería el responsable del crimen y que era amigo de la víctima, fue alojado en un centro penal juvenil de la capital cordobesa, donde será sometido a estudios de diagnóstico psicosociales y ambientales.
Por su parte, la psicóloga Analía González Malacalza, MN. 34222, explicó en Telenueve: “Tenemos que rastrear qué pasó en la historia de ese menor como para que llegue a cometer un crimen”, sobre las posibles razones por las cuales un chico podría matar a otro.
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Y agregó: “Existe la psicopatía que empieza a muy temprana edad, en muchos casos, en los niños, que a veces no es identificado y los psicólogos que trabajamos con menores somos los que nos damos cuenta”.