La industria automotriz creció 10,6 por ciento en junio y cerró el primer semestre con un incremento interanual acumulado de 21,6 por ciento, según el último informe estadístico publicado por la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) que agrupa a las principales terminales del país. Ese desempeño se dio pese al marco de restricciones para importar que existe en varios sectores de la industria. A su vez, Adefa informó una caída de las exportaciones en junio de 27 por ciento.
La producción de automóviles y vehículos comerciales livianos llegó a las 53.522 unidades en el sexto mes del año. Son niveles compatibles con los exhibidos a mediados de 2022, año en que la industria recuperó los estándares productivos de 2014. Por su parte, las exportaciones anotaron una caída del 27 por ciento interanual en junio que obedeció a “problemas logísticos y de fletes”, según informó el titular de Adefa y presidente de Ford Argentina, Martín Galdeano.
En el acumulado de los primeros seis meses del año las exportaciones crecieron 8,6 por ciento. El principal destino de las exportaciones es Brasil, que explica el 62,6 por ciento de las ventas totales, seguido de América Central con el 9,3 por ciento y luego están Chile, Colombia y Perú que explican cada uno cerca del 7 por ciento de los despachos totales.
Las importaciones del sector no son informadas por Adefa pero consultando las bases de Indec se advierte un incremento del 29,4 por ciento en las compras medidas en dólares de “piezas y accesorios para bienes de capital” provenientes de Brasil durante los primeros cinco meses del año. Dato que acompaña al desempeño del total Mercosur pero contrasta con la caída total de las importaciones acumulada del 6,3 por ciento.
En tanto, las ventas internas a concesionarios aumentaron 18,5 por ciento en junio y 14,1 por ciento en el primer semestre del año. En el caso puntual de vehículos nacionales las variaciones son mayores: del 39,8 y 38,4 por ciento respectivamente.