La joven de 29 años que este jueves salvó su vida porque su expareja falló en su intento de asesinarla con un arma en mal estado y terminó detenido tras ser baleado por la policía en el barrio porteño de Saavedra, aseguró que esta “viva de milagro”, que el agresor le gatilló “tres veces en la cabeza” pero no salieron las balas y que, tres días antes, el hombre la había acosado en una esquina pero también intervino un patrullero.

“Mi ex intentó gatillarme varias veces en la cabeza y después al cuerpo, pero por suerte iba pasando un patrullero de casualidad y pude salir corriendo y me pudieron asistir y resolver de la mejor manera la situación. Tres veces me gatilló en la cabeza, estoy viva de milagro”, dijo Dana.

La mujer explicó que ella “venía con los auriculares” puestos desde “el gimnasio” y que fue en ese momento cuando el acusado, Julián Reina (39), la abordó “por atrás con el arma en la cabeza”. “No me mató porque esas balas no salieron, intentó desde un primer momento dispararme tres veces en la cabeza, después como no pudo, intentó al cuerpo y cuando empezaron a salir las balas ya estaba la policía ahí y yo pude esconderme atrás del patrullero, y los policías tuvieron tiempo de actuar”, aseguró.

Dana contó que la relación con Reina había terminado “hace tres o cuatro meses”, que nunca había notado “una actitud violenta” por parte de él, salvo un “antecedente” que hubo el lunes cuando la interceptó en la esquina de la casa de su familia en el barrio de Saavedra, a metros de donde ocurrió todo ayer, y donde también hubo una intervención policial.

Sobre el hecho del lunes, explicó: “Me había estado esperando en la esquina porque quería hablar conmigo, pero pasó un patrullero y les pedí por favor que lo demoraran para que yo pudiera ingresar a mi casa. Después no tuve más noticias hasta ayer”.

La mujer agradeció la actuación a los dos policías que le salvaron la vida, de quienes dijo que eran sus “ángeles de la guarda” y que gracias a ellos hoy puede estar con su hija, una niña que tuvo con otra expareja. Y recomendó que cualquier mujer que “tenga un mínimo miedo, haga la denuncia” y “busque ayuda”.

La propia Dana subió una historia en su perfil de Instagram con un video en el que, mientras se escucha la canción "Té para tres" de Soda Stereo, se ve su mano acariciando el pelo de una niña y el mensaje: "Gracias, gracias universo", seguido de un emoji de estrellas.