En su intento oportunista de fungir de superhéroes, parte de la dirigencia política de Santa Fe y actores de la administración de justicia produjeron un fenómeno de libro de amplificación de la desviación. Lograron la traducción de la fantasía en realidad. Materializaron una profecía autocumplida y convirtieron a la banda de Los Monos en los hipervillanos de Ciudad Gótica. Y jueces y funcionarios asumieron el papel que buscaban de superhéroes. Basta hacer archivo y ver las fotos publicadas del gobernador Bonfatti, el ministro de seguridad Lamberto, el ex juez Vienna y el ex camarista Camporini luego del allanamiento a las viviendas de la familia Cantero en la Granada o los "abrazos" al tribunal en ese intenso 2013.

Pero un nuevo capítulo de este fenómeno sucedió hace días en el homenaje a Maxi Rodríguez en el estadio de Newell's. Los hipervillanos cumplieron exitosamente su rol y traduciendo fantasía en realidad se hicieron presentes, con toda la fuerza simbólica del mal, y le mostraron al mundo su trapo de 50 metros  por 50 metros, desplegado detrás de Messi, Di Maria, Rodríguez y autoridades. 

¡Pero los superhéroes no se quedaron atrás! Cómo iban a perderse ser parte de semejante oportunidad de hacerse ver también. Y entonces hicieron su parte, y reaccionaron de una manera que no hizo más que amplificar, otra vez (¿¡y van?!) el prestigio de los hipervillanos. Los villanos desplegaron su trapo en las caras de los superhéroes el sábado 24 de junio pero como los fiscales superhéroes superrentados no mueven un dedo en un finde allanaron el estadio ¡recién el lunes siguiente a la noche!

Sí, está leyendo bien: dos días después y con mucho anuncio previo y posterior. Y como era de esperar ¡no encontraron nada! Y a pesar de allanar dos veces más se fueron con las manos vacías y dando pena. Y dando entrevistas, claro, porque quieren figurar hasta cuándo fracasan. Y los hipervillanos no se perdieron la oportunidad, más bien la estaban esperando. ¡La hija del jefe entonces posteó una foto de la bandera con un "sigan buscando" en la mejor tradición de El Guasón o del Pingüino! 

El oportunismo de Bonfatti cuando fue gobernador, la banda de policías narcodelincuentes que habilitó, el sector de la justicia que lo acompañó y los medios que participaron de esa operación comenzaron esta historia de traducción de la fantasía en realidad. Convirtieron a una banda local caracterizada por el uso expresivo de la violencia en hipervillanos de fama internacional. Así, con total ignorancia y desaprensión, amplificaron la violencia y las oportunidades de negocios de la banda, los que siempre tuvieron el componente central de ese prestigio y del uso expresivo de la violencia letal.

De un tiempo a esta parte, el rol de superhéroes en la traducción de la fantasía en realidad y la amplificación de la violencia la llevan adelante -luego de Maximiliano Pullaro, que fue ministro de Miguel Lifschitz- los fiscales provinciales David Edery y Luis Schiappa Pietra. Pero ni el inmenso ego que tienen les hizo moverse un sábado a la noche para ir a buscar la bandera. Allanaron un lunes a la noche y tuvieron que ir a descolgar al ángulo del arco del MPA el "sigan buscando" que les clavó la hija del hipervillano jefe.

Sería todo muy entretenido si fuera una película de los Coen. Pero no lo es. Es un capítulo más en la amplificación de la violencia letal en Rosario.

*Profesor de la Cátedra de Criminología de la Universidad Nacional de Rosario.