"Nosotros, desde el primer día, apuntamos a que el Programa Puentes se convierta en una política de Estado y a que sea irreversible, para que aumente y garantice la educación universitaria en todos los puntos de la Provincia de Buenos Aires." Con esas palabras, Juan Brardinelli, el director del Consejo Provincial de Coordinación con el Sistema Universitario y Científico explica a BuenosAires/12 el papel central que toma el Programa Puentes para la gestión oficialista. Cuando dice "nosotros", hace referencia al Consejo Provincial de Coordinación con el Sistema Universitario y Científico, a la Jefatura de Asesores, organismo del cual dependen sus funciones, y al gobernador Axel Kicillof, quien "fijó esta política como una de sus prioridades dentro del plan de desarrollo 6x6", según Brardinelli.

Este martes, el gobierno bonaerense inauguró el Centro Universitario de Carmen de Areco. Es el décimo tercero que se estrena a través de Puentes y contó con una inversión de 15.000.000 de pesos. Brardinelli, a cargo del área que ejecuta la política de extensión de los estudios terciarios destaca el rol del programa para garantizar el derecho a estudiar como herramienta para fomentar el arraigo y el desarrollo en el interior bonaerense. 

Carlos Bianco, jefe de Asesores del gobernador, dijo en la presentación que "cada vez que se inaugura un centro universitario es una fiesta". "Porque estamos garantizando el derecho de nuestros pibes y pibas a estudiar y quedarse en su pueblo.” En sus palabras hay dos ejes transversales del Programa Puentes, que son el derecho al estudio y el arraigo.

En esa sintonía, el director ejecutivo del Consejo Provincial de Coordinación con el Sistema Universitario y Científico destaca: "Garantizamos el acceso a la educación universitaria, que es un derecho. Cuando los habitantes de diversas ciudades quieren realizar sus estudios universitarios, la única opción que tienen es la de mudarse a una ciudad que tenga su propia universidad. Allí surgen dos posibilidades: o tienen los medios económicos para hacerlo, o no lo tienen y ven coartada su libertad y su derecho a la educación superior. Además, cuando tienen los medios, muchas veces son escasos y van hacia ciudades centrales lo que genera desarraigo con la familia y la red social, algo que contribuye a la dificultad de desarrollo que atraviesan las ciudades de origen, que se van despoblando de camadas más jóvenes que son las que motorizan el desarrollo de su región".

Con el de Carmen de Areco, ya son 13 los centros universitarios inaugurados a través del Programa Puentes, una política que busca acercar el acceso a los estudios terciarios, dado que 82 de los 135 municipios bonaerenses no cuentan con una sede universitaria propia. Puentes es articulado entre los municipios, las universidades y el Estado de la Provincia de Buenos Aires, que en conjunto "buscan una oferta que se adapte a las necesidades y a los proyectos de cada territorio", según Brardinelli.

El convenio se firma de manera tripartita y el gobierno bonaerense financia la oferta académica. Los subsidios ascienden hasta los 30.000.000 de pesos y es el municipio quien decide los destinos de los fondos, que pueden utilizarse para construir un centro universitario desde cero, para reformar un centro existente, hacer una obra o adquirir equipamiento para el dictado de carreras. En la actualidad, según Brardinelli, la Provincia trabaja con 50 municipios y se dictan 71 carreras, donde estudian más de 3.000 habitantes del interior.

El titular del Consejo amplía: "Como Estado, recibimos los pedidos de los municipios y en base a eso trabajamos los ejes del programa. Con el municipio decidimos qué carrera van a querer que se dicte, entonces articulamos con las universidades para buscar una oferta que se ajuste a las necesidades y los proyectos de cada lugar". 

"Desde el Consejo, apuntamos a carreras que tengan que ver con la ciudad, tanto con necesidades de sus sectores productivos, como también con sus proyectos. Hay ciudades que tienen proyectos de desarrollo en un área específica, entonces tratamos de hacer hincapié allí y usamos la universidad y toda su amplitud y conocimiento, para fomentar el desarrollo y darle la fuerza que necesita cada territorio. Es una interacción muy interesante, allí se construyen y se encuentran los puntos de desarrollo", detalla Brardinelli.

En el caso de Carmen de Areco, el centro universitario dictará la Licenciatura en en Administración Agraria, y la materia estará a cargo de la Universidad Nacional Arturo Jauretche. Pese a que en la sede central de Florencio Varela la Licenciatura se dicta de manera virtual, en el municipio conducido por Iván Villagrán lo harán de forma presencial, ya que están "aggiornando los recorridos académicos y el dictado de las carreras", según Brardinelli.

"Articulamos que los dos primeros años sean presenciales, porque pasar de la secundaria a la universidad es un salto grande, y si a eso le sumamos la modalidad virtual, es un doble salto. Necesitamos romper las barreras, en muchos casos organizamos salidas y visitas donde los habitantes de las diversas ciudades viajan hasta la sede central de las universidades para conocer, hacer prácticas y entrenar en sintonía. De esa manera dimensionan y generan sentido de pertenencia para con la institución", detalla.

Al analizar las diferentes situaciones a las que debieron enfrentarse cuando debieron hacerse cargo de la gestión, Brardinelli pone el foco en las dificultades que encontraron en el sistema universitario y científico al asumir en 2019. "Nos encontramos un sistema muy atacado y desfinanciado por el gobierno de Mauricio Macri a nivel nacional y de María Eugenia Vidal a nivel provincial", detalla, y de cara a las elecciones señala la existencia de "un temor" que se genera a partir de la incertidumbre de no saber "qué pasará si no continúan estas políticas que garantizan derechos". "Es una pregunta que surge", explica.

A su vez, desmiente la idea que advierte que, al abrir un centro universitario, desciende la cantidad de alumnos en sedes centrales: "Nosotros vemos una matricula que crece, y que no compite con otras universidades, y cada vez que se creó una universidad, la taza bruta de matriculación aumentó". 

"No hay universidades por todos lados, no sobran", arremete cuestionando uno de los principales argumentos con que la oposición más dura se opone a la creación de nuevos centros de estudios. "Estamos convencidos de que faltan universidades, y vamos a seguir creciendo en la oferta universitaria, para mejorar el acceso", agrega. Y sentencia: "Por indicación de Axel Kicillof y Carlos Bianco, desarrollamos un Programa que tiene flexibilidad para atender las diversas necesidades de cada uno de los 135 municipios y buscamos que se establezca como una política de Estado, estable e irreversible".