Un operativo de fiscalización de la Aduana en el paseo comercial a cielo abierto de calle San Luis detectó irregularidades en varios comercios que tenía para la venta mercadería de origen extranjero sin la debida documentación. Como resultado de las inspecciones se produjo el secuestro de más de 2 mil productos: 500 prendas de vestir, 1.500 unidades de ropa interior y 391 juguetes.
Según las estimaciones del personal de Aduana, se estima que el valor de las mercancías secuestradas asciende a 8.943.850 de pesos.
Durante el operativo de control, los agentes aduaneros encontraron una cantidad importante de mercadería que carecía de la documentación que avalara su legítimo ingreso al territorio nacional, por lo que se presume que había ingresado al país de manera indebida. En definitiva, de contrabando.
Entre los productos en infracción se secuestraron buzos, pantalones, remeras, ropa interior y juguetes.
Dada la importación irregular de los bienes, incluso la autenticidad de los mismos quedó en duda para los sabuesos de la Aduana. Incluso advirtieron que “podría haber fraude con las marcas en mercancías con inscripciones de reconocidas marcas”.
Se labraron actas por tenencia injustificada de mercadería de origen extranjero con fines comerciales y se secuestraron los productos en los términos de los artículos 986 y 987 del Código Aduanero. Dado el valor estimado de las mercancías en infracción, las multas, según las estimaciones de la Aduana, podrían ascender a 44.719.250 pesos, en total.
A su vez, en el marco del artículo 989 del Código Aduanero, los agentes clausuraron provisoriamente uno de los locales de ropa, ubicado sobre la calle San Luis, aunque no se dieron a conocer los nombres.