La Justicia Federal de Rosario ordenó en las últimas horas el traslado del sindicado narco Esteban Lindor Alvarado, que cumple condenas en el penal de Ezeiza, desde donde protagonizó un frustrado intento de fuga en helicóptero, en marzo pasado. La resolución fue tomada por el Tribunal Oral Federal Nº 2, ante un pedido del fiscal Fernando Arrigo, relacionado con un "incumplimiento de las medidas de seguridad dispuestas anteriormente", aunque no indica cuál será la cárcel de destino del recluso.
Alvarado está en prisión desde 2019, cuando fue detenido en un camping de Córdoba. Estuvo en la cárcel de Piñero hasta junio de 2021, cuando ocho presos se fugaron y, como consecuencia de lo ocurrido -junto a otros detenidos "de alto perfil"- fue sacado de esa unidad penitenciaria. Así participó vía zoom desde Ezeiza de las audiencias del juicio que terminó en junio del año pasado con condena a prisión perpetua.
En marzo pasado, tras conocerse los detalles del intento de fuga de Ezeiza -que incluyó la compra de un helicóptero en Paraguay-, un tribunal federal rosarino decidió endurecer las condiciones de detención: alojarlo en una celda individual, realizar requisar sorpresivas, prohibición de las comunicaciones móviles, y permitir que solo pueda hablar por un teléfono fijo con personas habilitadas y que lo visiten en el penal. La resolución judicial, según publicó este diario en abril pasado, sobrevino tras comprobarse que tenía chips de celular escondidos en su celda.
Ahora, por cuestiones relacionadas a un "incumplimiento de las medidas de seguridad dispuestas anteriormente", en relación al detenido, el fiscal Arrigo solicitó el traslado que en las últimas horas fue resuelto por el TOF N° 2 de Rosario.
La resolución ordena el traslado a otra unidad de detención del servicio penitenciario federal para el preso que cumple una pena de prisión perpetua dictada por los jueces Alejandro Negroni, Patricia Bilotta y María Isabel Mas Varela, como responsable de delitos de homicidio agravado por uso de arma y premeditación entre dos o más personas, como instigador del crimen de Lucio Maldonado; amenazas coactivas, jefe de asociación ilícita y lavado de activos.
Una semana después, la Justicia Federal lo penó con 15 años de prisión por organizar el transporte de 493 kilos de marihuana a Río Negro, en noviembre de 2017, en el marco de una causa que fue llevada a juicio por Arrigo.