Google lanzó esta semana su chat de inteligencia artificial en español y sigue avanzando en la competencia contra chatGPT, que en el último mes perdió un 10 por ciento de sus usuarios. La carrera es a todo o nada para intentar controlar el modelo que usarán las empresas para ofrecer servicios. Se trata de una tendencia que no necesariamente genera optimismo. El caso de la plataforma india de comercio electrónico Dukaan es el ejemplo: la semana pasada anunció un recorte del 90 por ciento de su personal, principalmente del equipo de ventas, que fue reemplazado por un bot interactivo.
Las preocupaciones sobre el mercado laboral y el resto de los impactos que puede generar la inteligencia artificial suelen ocupar la guía de noticias, aunque no es la única tecnología que plantea transformaciones radicales para los próximos años. Un documento del Banco Interamericano de Desarrollo destaca que existen avances relevantes en 10 sectores estratégicos y que América latina tiene oportunidad de ser vanguardia en más de uno.
Se menciona que existe un “big bang” de innovación en energías limpias, materiales avanzados, biotecnología, tecnología de la salud, nanotecnología, robótica, industria espacial y computación infinita, entre otros. En cada una de estas verticales de negocio figuran muchas subcategorías, que van desde el software de edición genética y la agricultura molecular hasta el desarrollo de superconductores o la internet cuántica.
En el documento del BID se presentan algunos números sobre el potencial de estas industrias de tecnología profunda (“Deep tech”) para Latinoamérica. Las empresas que operan en este sector en la región tienen un valor de mercado en conjunto de más de 8 mil millones de dólares. Existen 3 startups con un valor superior a los 500 millones de dólares cada una, y otras 24 con una valorización superior a los 50 millones.
El estudio destaca los desarrollos de empresas como Establishment Labs, NotCo, Stamm, Satellogic y Moolec, Puna.bio, Feedvax, Zippedi, Kingo y Bioceres Crop Solutions. A su vez, se indica que el potencial de crecimiento de todo el ecosistema de compañías de la región dedicadas a investigar y generar tecnologías e innovaciones radicales es de 100 veces.
El informe también muestra los casos de éxito internacional, donde sobresale la transformación de China en los últimos años. “China reconoció la necesidad de moverse hacia una economía impulsada por la innovación para sostener su crecimiento”, indica. Para lograrlo, el país ha implementado sistemáticamente estrategias a largo plazo como "Hecho en China 2025" (lanzada en 2015) y la estrategia de inteligencia artificial (lanzada en 2017).
“Estas estrategias han involucrado la asignación significativa de recursos. El resultado es que China actualmente tiene una participación importante en las industrias del futuro. A pesar de representar el 19 por ciento de la población mundial y tener el 22 por ciento de las patentes, el país tiene entre el 34 y el 77 por ciento de participación de mercado global en industrias dominadas por la innovación de Deep Tech, como lanzamientos espaciales, paneles solares (fotovoltaicos), vehículos eléctricos, robots industriales y baterías”, concluyó el reporte.