Este lunes en la madrugada se reportó una situación de emergencia en el puente construido por Vladimir Putin para unir la península de Crimea con el territorio ruso. Poco después quedó claro que se trató de un ataque con drones o misiles submarinos por parte de Ucrania. El puente es una estructura doble que lleva una vía de ferrocarril y en paralelo, otra para autos y camiones. El ataqué golpeó esta última, generando un pequeño hundimiento de la ruta, suficiente para hacer chocar a un auto contra el hormigón armado: murió una pareja y su pequeña hija quedó mal herida.
Según la agencia de noticia AFP, una fuente ucraniana de su confianza le informó que detrás del ataque estuvieron los servicios especiales y las fuerzas navales de ese país, agregando que "era difícil llegar al puente, pero al final fue posible hacerlo".
La península de Crimea está unida por un istmo a territorio ucraniano –en parte tomado por Rusia-- y no tiene un nexo natural con territorio ruso. Por eso Putin hizo construir el puente en 2018 reforzando la presencia de su país en la península anexada en 2014: tiene un valor estratégico fundamental en la región, incluyendo la histórica base militar de Sebastopol donde Rusia acumula sus fuerzas navales del Mar Negro. Durante la guerra contra Ucrania, este puente es clave para el traslado de tropas, municiones, nafta y suministros que las fuerzas armadas necesitan para combatir contra los ucranianos. Por esta razón ya Ucrania había atacado el puente, haciendo estallar un camión bomba en octubre de 2022 generando tres muertos, pero sin llegar a cortar el flujo de transporte a través del puente de 19 kilómetros –el más largo de Europa— que costó 3.600 millones de dólares según la licitación que ganó Arkady Rotenberg, un excompañero de judo del presidente Putin.
Rusia acusa
Rusia acusó a Ucrania de perpetrar el ataque contra el puente, a través de la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, María Zajárova: "El ataque fue llevado a cabo por el régimen de Kiev”. El gobernador prorruso de Crimea, Serguéi Aksiónov, había informado el lunes temprano que el tráfico a lo largo de un puente había quedado interrumpido a raíz de una "emergencia". Horas más tarde, el presidente Putin pidió reforzar las medidas de seguridad: "Teniendo en cuenta que se trata del segundo acto terrorista en el puente de Crimea, espero propuestas concretas para mejorar la seguridad de esta infraestructura de transporte estratégica" Y agregó: "Claramente habrá una respuesta de Rusia. El Ministerio de Defensa prepara propuestas adecuadas".
Según el vice primer ministro ruso, Marat Jusnulin, las estructuras de soporte del puente no resultaron dañadas por la explosión, lo que Putin calificó de "buena noticia". El canal de Telegram, Rusia Zona Gris --afiliado al Grupo Wagner-- publicó que hubieron dos explosiones: una a las 03:04 am y otra 16 minutos después.
Un puente estratégico
Si el puente de Crimea fuese inutilizado, Rusia quedaría en la incómoda situación de que la única vía de salida terrestre ante una necesidad de escape para las decenas de miles de tropas que tiene en las zonas de Kerson y Crimea --pertenecían a Ucrania y fueron anexadas-- sería la autopista costera que bordea el mar de Azov. Pero incluso después de este segundo ataque –al menos según las autoridades rusas— la estructura general no ha sido dañada y el tráfico se reanudó seis horas después.
En lo que se ha leído como un reconocimiento indirecto por parte de las autoridades ucranianas de la autoría del ataque, el portavoz del Servicio de Seguridad de Ucrania, Artem Degtyarenko, declaró que lo que ha sucedido en el puente será revelado una vez que Ucrania haya ganado la guerra.