No sólo para las bandas del interior argentino resulta indispensable hacer pie en Buenos Aires –la ciudad y su conurbano– si el deseo es proyectarse en el mercado nacional: el desafío también se lo imponen muchos artistas uruguayos que buscan resonancias al otro lado del Gran Río. Ejemplo de literal actualidad es Los Cuerpos, quinteto montevideano que comenzó su rote criollo ayer en La Plata y lo terminará este fin de semana en Quilmes y Monte Grande, aunque los dos shows fuertes estarán entremedio: hoy en Rincón Casa Cultural y mañana en el Club Cultural Matienzo.
El grupo viene a mostrar Deste lugar, su segundo disco, un material con “sonidos que buscan plasmar la identidad uruguaya”. ¿Y cuál sería? “El candombe mucho tiene que ver, porque viene de hace mucho tiempo y mantiene una tradición, aunque en simultáneo sigue evolucionando, como un diamante al que aún le quedan muchas caras por tallar”, orienta Hernán Peyrou, voz y teclados de un proyecto al que además dota de canciones. Aunque también observa: “En Los Cuerpos siempre está presente la importancia de lo rítmico más allá del género, porque tampoco todo es candombe en la vida del uruguayo”.
Peyrou fundó el grupo hace seis años, después de egresar en la Escuela de Música Contemporánea de Buenos Aires. “Tenía la necesidad de aplicar y fusionar toda esa data jazzera que recibí con algo que me identificara más”, explica. El combo tomó forma con su hermano Pablo en bajo y su compañero de estudios Sebastián Delgado en guitarra, a quienes hoy completan el percusionista Coby Acosta y el baterista Mateo Ottonello.
El nombre del nuevo disco presupone una reivindicación del espacio propio, personal. “Lo más sincero es hacer música de nuestra tierra”, subraya Peyrou. “Pero no por patriota sino por coherencia cultural: me resulta más natural hacer canciones con ritmos de acá, porque mi memoria y mi paisaje sonoro los construí entre tambores, murgas y guitarreadas en familia, y no haciendo jazz o blues.”
Mientras iba en moto a grabar Hombre vela, el debut de Los Cuerpos, Hernán Peyrou terminó debajo de un camión blindado. “Me quebré dos vértebras y por milímetros no quedé parapléjico”, recuerda. Cinco años después, la ruta le ofrece mejores planes: recorrer Buenos Aires y seguir profundizando el gen uruguayo en el circuito rock argentino.
* Jueves 17 en Rincón Casa Cultural, viernes 18 en C.C. Matienzo, sábado 19 en Interlunio de Quilmes y domingo 20 en Club Dumas de Monte Grande.