La organización civil Fundación Vía Libre presentó un amparo y una cautelar ante la Justicia Electoral de la Ciudad de Buenos Aires para impedir que el gobierno porteño avance con el voto electrónico en las elecciones desdobladas y concurrentes. Vía Libre alega que la modalidad provista por la empresa Magic Software Argentina (MSA) no es segura y que las condiciones de contratación de la compañía son irregulares.
La referente de la Fundación, Beatriz Busaniche, dialogó con AM750 y explicó los reparos que tienen desde esa organización respecto del voto electrónico y de la empresa MSA.
"Los sistemas de voto electrónico tienen problemas en general y por eso es que han sido declarados como inconstitucionales en países como Alemania y Austria, porque son esencialmente una caja negra que intermedia entre quienes votan y el resultado de la elección", argumentó Busaniche.
En ese contexto, la activista y especialista en derechos y tecnologías digitales explicó que el sistema electoral debe cumplir dos funciones: consagrar a un ganador y convencer al perdedor de que efectivamente perdió. Por lo tanto, el sistema debe tener la capacidad de auditarse para que el proceso esté claro para las partes involucradas -que siempre tienen intereses contrapuestos- y no se desconfíe del resultado. "Nada de eso es posible con este sistema", sentenció Busaniche.
La entrevistada recordó al respecto un informe que realizó en 2017 el equipo de investigadores del Conicet a pedido del entonces ministro del Interior, Rogelio Frigerio: "Ese informe dice que entre la instancia de la emisión del voto y el conteo de mesa es la parte en la que más riesgo supone incorporar una tecnología al escrutinio. Desaconsejan el uso de tecnología porque es ahí donde se juega la integridad, el secreto y un elemento que es nodal: la legitimidad del resultado", detalló la especialista en diálogo con Aquí, allá y en todas partes.
Además, Busaniche se refirió al conteo en el día de la elección y sostuvo que desde las autoridades electorales de la Ciudad "bajan la instrucción de que el conteo se haga con la máquina", es decir, que se haga "el conteo rápido".
"Es el conteo más inseguro porque, si hay alguna discrepancia entre lo que dice la boleta y lo que dice el chip, toda la certificación legal de la mesa va a ser emitido por la máquina, no por el presidente de mesa", advirtió.
A medida de Magic Software Argentina
Respecto de la empresa que se encargará del escrutinio en las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires, Busaniche señaló que la compañía fue "la única oferente" de una licitación que, por otra parte, se hizo "muy rápido" porque Horacio Rodríguez Larreta anunció recién en abril que las elecciones serían desdobladas y concurrentes, en beneficio del candidato predilecto del jefe de Gobierno porteño, el radical Martín Lousteau.
A su vez, la referente de Vía Libre cuestionó la licitación al sostener que los requisitos para presentarse "parecen a medida de MSA". "La evidencia es que (MSA) es la única oferente, habiendo otras opciones en el mercado, que ofertó además por el monto máximo del presupuesto que la Ciudad tenía para la elección", ironizó la entrevistada.
En este punto, Busaniche también criticó las auditorías que le se hicieron a la compañía: "Son de tal precariedad y pobreza que ni siquiera se las puede llamar auditorías (...) En ambas (realizadas por la UTN y la Facultad de Ingeniería de la UBA) dice: 'auditamos lo que la empresa nos dio y esas no son las condiciones en las que se va a votar el 13 de agosto'", reveló la activista, que además contó que ningún profesional firmó los informes presentados.
Y concluyó: "Hay multiples formas de alterar los resultados. La irregularidad más común documentada sobre este mismo sistema es que permite cargar en el chip de la boleta más de un voto".