El teatro es siempre un acontecimiento único e irrepetible. Desde el espacio en el que se realiza la función, hasta la respuesta del público presente, pasando por la energía interpretativa del elenco, un pequeño detalle puede cambiarlo todo. Esa es su magia. Una esencia presencial, pero que a la vez tiene la posibilidad de encontrar nuevas maneras de expresarse cuando sale de su ámbito natural. Un desafío que la TV Pública encaró con Teatro, el ciclo que desde hoy y todos los viernes a las 22 pondrá en pantalla siete versiones de obras de teatro en formato audiovisual, en un trabajo conjunto entre los y las directoras teatrales y un realizador televisivo. Una conjunción que no busca hacer “teatro filmado”, sino adaptar la obra a otro arte para enriquecer y captar su esencia a través de recursos que le den una nueva dimensión.
Teatro cuenta con la curaduría de Rubén Szuchmacher, el reconocido director y docente teatral, que se encargó de convocar y supervisar la propuesta. “Al comienzo pudimos consensuar que había mucho interés en la comunidad teatral por este proyecto”, explica el curador del ciclo. “La posibilidad de llegar a lo largo y ancho del país con los espectáculos -detalla- entusiasmó a los y las artistas, en momentos en que los costos de una gira presencial son absolutamente imposibles de ser cubiertos. Además de criterios artísticos, sabíamos que teníamos que tener en cuenta cuestiones de género y de geografía, para lo cual intentamos balancear la participación de mujeres como directores o actrices, como también pusimos la mirada en espectáculos producidos en las ciudades de las provincias argentinas".
El estreno del ciclo será con La Pilarcita, la celebrada obra de María Marull, que ya lleva nueve años en cartelera. Para este envío, la dirección escénica quedó en manos de la autora, mientras que de la dirección audiovisual se encargó Franco Verdoia.
“Siempre da miedo pensar en filmar teatro o encontrar la manera de que resulte interesante algo que es irreemplazable, como la experiencia teatral”, le cuenta Marull a Página/12. “En realidad, no creo que el teatro necesite resignificarse. Creo que no necesita nada el teatro más que existir así tal y como es desde hace tantos años. En este caso, me interesó que la propuesta no fuera filmar teatro, o sea hacer teatro filmado, sino encontrar un lenguaje audiovisual. Para eso, tuvimos que descubrir esa nueva dimensión del material, que entiendo que es diferente en cada obra particular”, puntualiza.
La directora, que fue alumna de Szuchmacher, trabajó a la par con Berdoia para encontrar el tono justo para la versión televisiva de su criatura teatral. “Hicimos un trabajo en conjunto -detalla- entre la gente del teatro y la del canal, desde escenógrafos, vestuaristas, iluminadores de La Pilarcita, para mantener la esencia de la obra y la estética. Utilizamos algunas cosas de la obra y otras se construyeron, como la escenografía… No me gusta la palabra adaptar porque, en definitiva, más que una adaptación es una una nueva dimensión de la obra. Se eliminó la cuarta pared que tiene el teatro y se hizo una escenografía de 360 grados para poder contar esta historia filmándola y que fuera una ficción en sí misma”. Las actrices Julia Catalá, Pilar Boyle, Mercedes Moltedo y el actor Francisco Ruiz Barlett le dan vida a esta historia ambientada en la celebración correntina a la santa popular La Pilarcita en un remoto pueblo correntino.
Si bien La Pilarcita va por su novena temporada, convirtiéndose en uno de los sucesos teatrales más aplaudidos de la escena porteña de los últimos años, Marull confiesa que el trabajo para el ciclo televisivo le permitió encontrar nuevas perspectivas sobre la obra que escribió y dirige. “Siempre -reconoce- se puede seguir descubriendo cosas: algo del tono y de la cercanía que da la tecnología, la cámara, ese ojo de la cámara tan cerca y que uno puede ir y venir y tener más sutilezas, nos hizo revisitar y repensar partes del texto. Porque en una función el trazo es más grueso, en el sentido de que hay que proyectar la voz y se tiene que entender y no hay tanta sutileza. Esta propuesta nos permitió encontrar más capas. Lo mismo con filmar algunos detalles, construir toda la casa de Celeste, habitarla, o poner la cámara desde lugares donde nunca vemos, porque en el teatro nosotros siempre tenemos un mismo frente, que es el público, y en este caso pudimos ver a los personajes desde adentro, desde el costado, desde arriba, desde abajo… Fue enriquecedor. Y como el teatro es algo tan efímero, tan potente y tan maravilloso, muchas veces no llega a todos los lugares que uno quisiera y Teatro es una buena oportunidad que la TV Pública ofrece de hacer que gente de todo el país vea estas historias”.
A lo largo del ciclo, la propuesta incluye la posibilidad de ver versiones de Absentha, de Alejandro Acobino, con dirección escénica de Ana Sánchez y Ana Piterbarg en dirección audiovisual; Ubu Patagónico, de Mariana Chaud, con dirección escénica de la autora y Alejo Moguillansky en dirección audiovisual; Por culpa de la nieve, de Alfredo Staffolani, con dirección escénica del autor y Diego Lublinsky en dirección audiovisual; Un domingo en familia, de Susana Torres Molina, con dirección escénica de Juan Pablo Gómez y José María “Pigu” Gómez en dirección audiovisual; La vida extraordinaria, de Mariano Teconi Blanco, con dirección escénica del autor y Fernando Salem en la dirección audiovisual; y Griegos, creación colectiva a partir de Agamenón de Esquilo, con la dirección escénica de Daniela Martín y dirección audiovisual de Rodrigo Guerrero.